La pandemia del Covid-19 nos ha cambiado la vida. Eso es una realidad un año después. Y las personas con discapacidad lo han notado el doble. Un cambio a los que se suma los problemas de accesibilidad. Algo que también han evidenciado los estudiantes universitarios, como recoge ‘Universidad y Discapacidad’.
En este sentido, el 21% de los universitarios con discapacidad ha afirmado tener mayores dificultades para seguir las clases en tiempos de coronavirus. El estudio aborda el grado de inclusión actual de las personas con discapacidad en el sistema universitario español.
Este estudio ha sido realizado por la Fundación Universia, con el apoyo de Banco Santander. Además, ha contado con la colaboración de Fundación ONCE, Crue Universidades Españolas, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) y el Real Patronato sobre Discapacidad del Gobierno de España.
El objetivo de este informe es medir el grado de inclusión de las personas con discapacidad en el sistema universitario español relativo al curso 2019-2020.
El impacto de la pandemia en los universitarios con discapacidad
Este curso ha estado marcada por la pandemia del Covid-19. Y la universidad no se ha visto exenta de ello, puesto que se han tenido que amoldar. El 21% de las personas con discapacidad afirma tener mayores dificultades para seguir las clases en tiempos de coronavirus.
En este sentido, el 24% de los universitarios encuestados se queja de la falta de recursos tecnológicos y dispositivos digitales para poder estudiar desde su hogar. A esto hay que sumarle las dificultades para realizar exámenes y seguir las clases, de la que también se quejan. A esto se le suma los problemas a nivel psicológico (aislamiento, soledad, ansiedad), entre otros.
Por otro lado, 9 de cada 10 estudiantes con certificado de discapacidad declara que puede estudiar perfectamente desde casa al contar con los dispositivos y los recursos informáticos para ello.
La mayoría de universitarios ha recibido correctamente la información
Respecto a los contenidos, casi un 80% estudiantes con discapacidad afirma que ha recibido correctamente la información necesaria para la realización de sus actividades académicas aunque un 17% afirma haber tenido muchas o bastantes dificultades para el seguimiento de las clases.
«Saber que un 80% de estudiantes con discapacidad afirma que ha recibido correctamente la información necesaria nos llena de satisfacción pero también nos hace pensar inmediatamente en quienes han tenido muchas o bastantes dificultades para el seguimiento de las clases», ha afirmado el presidente de Crue-Asuntos Estudiantiles y rector de la universidad de Murcia, José Luján.
A nivel institucional, más de la mitad de las personas encuestadas considera que la universidad española ha sido capaz de adaptarse muy o bastante bien a la nueva situación provocada por la pandemia. «Esta experiencia nos hace ver el futuro en clave de oportunidad, con la visión de no confrontar la enseñanza presencial (en clave social) frente a la enseñanza en remoto (en clave de innovación), sino con la idea de extraer lo mejor de cada una de ellas, para así plantear un tercer escenario inclusivo y accesible», ha indicado la directora de la Fundación Universia, Sonia Viñas.
¿Cómo son y cómo se sienten los estudiantes con discapacidad?
En relación con la percepción sobre el grado de inclusión de los estudiantes con discapacidad dentro de las universidades, el 20,7% de los 1.860 estudiantes consultados afirma haberse sentido discriminado en alguna ocasión a lo largo de sus estudios universitarios.
La responsable de Proyectos Globales y Comunidades de Fundación Universia, Paloma de Andrés, ha señalado que las principales razones están relacionadas «con algún tipo de problema con el profesorado, como faltas de respeto, falta de atención a sus necesidades, mala actitud, etc. (38,2%), o con problemas de accesibilidad, como barreras arquitectónicas, exámenes no adaptados, falta de adaptación curricular, etc. (37,9%)».
En cuanto a las relaciones con los compañeros, uno de cada tres estudiantes con discapacidad afirman sentirse aislados respecto a los demás compañeros. En este sentido, el 16% de los estudiantes con discapacidad considera que sus compañeros se comportan de manera diferente con ellos que con el resto. Además, el 35% estima que tiene más dificultades que sus compañeros sin discapacidad para relacionarse.
No obstante, destaca la colaboración entre los compañeros para el seguimiento de las clases por parte de aquellos estudiantes con discapacidad que lo necesitan, algo con lo que afirma contar una cuarta parte del estudiantado con discapacidad.
Más participación en las actividades académicas
La participación en actividades académicas es más elevada: más de un 40% declara que participa siempre que puede aunque hay más de un 15% que tiene la sensación de que se le aísla al intervenir en este tipo de actividades. La participación es inferior cuando se trata de actividades fuera del ámbito académico (ocio y tiempo libre, actividades deportivas, etc.): la mitad del estudiantado con discapacidad no participa nunca o casi nunca en este tipo de actividades y solo el 20% lo hace de forma habitual.
Por otro lado, se mantiene la tendencia de ediciones anteriores del estudio. Y es que predominaba la proporción de estudiantes con discapacidad presentes en la universidad es menor a medida que avanza el nivel formativo.
Así, de los 19.910 universitarios de grado, primer y segundo ciclo con discapacidad representados en el estudio, la proporción de estudiantes que permanecen en la universidad va disminuyendo, contando con un 1,5% de estudiantes de Grado, primer y segundo ciclo; 1% de posgrado y Máster y 0,8% de doctorado.
Tipo de discapacidad de los estudiantes
Por tipo de discapacidad se mantiene la tendencia. La discapacidad predominante entre los estudiantes de Grado, primer y segundo ciclo con discapacidad es la discapacidad física (30,4%). Le sigue de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo (11,8%). De cerca están las personas con discapacidad sensorial (10%). Por último, las personas con discapacidad psicosocial o relacionada con salud mental (3,9%).
Por rama de conocimiento, las universidades públicas cuentan con más estudiantes con discapacidad en Ciencias Sociales y Jurídicas, mientras que las universidades privadas tienen un porcentaje mayor de estudiantes en las carreras STEM.
Desde una perspectiva de género, el número de mujeres que se ha matriculado en el curso 2019-2020 en las universidades españolas es superior al de hombres (un 55% de mujeres frente a un 45% de varones). Si se tiene en cuenta la variable de la discapacidad, el número de mujeres con discapacidad respecto al total de estudiantes matriculados en las universidades es del 1,2%, frente al 1,6% de hombres.
1.860 universitarios con discapacidad realizaron la encuesta
El estudio ha contado con la participación de 1.860 universitarios con discapacidad que están cursando estudios universitarios . En el trabajo han participado 61 universidades (públicas y privadas). Todas las que han colaborado representan el 76% de universidades. Además, engloban al 87% de los universitarios con discapacidad del sistema universitario español.
Casi el total de las universidades (95,1%) participantes en el estudio cuenta con un servicio de atención al colectivo. Además, 6 de cada 10 de los estudiantes encuestados se han puesto en contacto en alguna ocasión con el Servicio de Atención a las Personas con Discapacidad de su universidad.
En la mayoría de casos, era para solicitar adaptaciones curriculares, recopilar información sobre sus derechos y solicitar becas o ayudas para el estudio. Además, ha aumentado el número de universidades que tienen en cuenta la variable de la discapacidad en todos los planes de estudio. En este sentido, ya ha alcanzado el 32%.
El 16% de los estudiantes con discapacidad encuestados dice haber encontrado barreras de accesibilidad en la facultad o en la escuela universitaria en la que cursan sus estudios. Respecto al profesorado, un 43% considera que sus profesores sí conocen y están al día de sus necesidades. Eso sí, alrededor de un 15% considera que el profesorado no adapta correctamente los materiales en las clases.