Hay conductores en España que deciden no seguir las normas y circulan con su vehículo cuando por ley no pueden hacerlo o lo deben hacer pero con ciertas limitaciones y restricciones. Situaciones como llegar a un examen conduciendo para recuperar el carnet, con el permiso retirado, usar un pinganillo para un examen teórico o circular con una licencia extranjera falsificada, son solo algunos ejemplos que pone la Dirección General de Tráfico de situaciones que han aparecido en algunos periódicos y que suponen un auténtico peligro para la seguridad vial y que «puede constituir un delito».
Un ejemplo muy común según la DGT
«No puedo circular de noche, pero lo hago». Es una frase muy común en algunos conductores que tienen restricciones a la hora de circular con sus vehículos por la noche. Según se explica en la web oficial de la DGT, «en 2023 se sancionó a 1.737 conductores por incumplir las adaptaciones, restricciones y limitaciones que figuraban en su permiso de conducir. Circular únicamente en un radio de 30 km en torno al domicilio habitual, restringir la conducción nocturna o incluir en el carné la necesidad de hacerlo con la corrección visual adecuada son algunos ejemplos del carné de conducir con restricciones».
¿Y qué ocurre si un conductor decide incumplir las condiciones especiales que marcan desde la DGT en su permiso de conducir? En estos casos, la DGT avisa de una multa de hasta 200 euros. «Además de ponernos en riesgo de sufrir un siniestro vial habrá que hacer frente a una infracción grave que supone 200 euros de multa, por ejemplo, si el permiso de conducción refleja que debemos llevar gafas, pero estamos conduciendo sin ellas», explican.
Respetar las normas así como las condiciones especiales que aparezcan en el carnet de conducir, es crucial para no comprometer la seguridad vial y acabar con una buena multa económica.