Menores con discapacidad visual de la provincia de Jaén han enviado una serie de vídeos y audios de cartas de ánimo a la residencia de mayores Sebastián Estepa Llaurens, en Jaén capital para transmitir a los residentes su apoyo y cariño durante estas semanas confinamiento.
La idea, que ha partido del equipo de Atención Educativa de la ONCE en Jaén, ha conmovido al centro que ha respondido de forma inmediata con otros vídeos de residentes en los que subrayan la valentía del alumnado. «Nos han tocado el alma», ha indicado la directora de la residencia, María José Cárdenas, en un comunicado de la ONCE.
En Jaén, la ONCE atiende a un total de 103 alumnos ciegos o con discapacidad visual grave de toda la provincia, en colaboración con la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, a través de 19 profesionales, nueve de ellos maestros, y dos equipos educativos.
Los maestros de la ONCE remitieron un escrito a la residencia, con los trabajos elaborados por sus alumnos con el fin de «daros ánimo y apoyo ante esta situación tan especial que estamos viviendo».
Dentro de las ideas puestas en marcha para estimular a su alumnado durante estas semanas, los profesionales educativos les propusieron que preparan cartas, dibujos, vídeos o audios con muestras de afecto, una actividad que conllevaba de paso la implicación directa de sus familias en la parte técnica.
Un gesto muy bonito
En uno de los vídeos María Vizcaíno, una niña de seis años, alumna de Infantil de Torredelcampo (Jaén), les dice a los residentes que es feliz porque puede jugar con su familia mientras enseña un póster que dice: ‘Ojalá pronto en nuestra sociedad cambien algunas cosas y las familias puedan pasar más tiempo compartiendo muchas cosas importantes’.
En otro José Antonio Redondo, de Andújar (Jaén), 32 años, toca con su guitarra el himno de España. Bruno Urbita, de Linares (Jaén), que es un estudiante de Ciclo Formativo Superior, 25 años, sordociego, les manda «a los abuelitos mucho ánimo para que esta situación pase pronto, se vaya este maldito virus, y podamos salir a la calle a abrazarnos, ir a la playa y a la piscina, pero sobre todo disfrutar del momento».
Roberto Sánchez, de Andújar, de 6 años, también deficiente visual de Primaria, les dice que, aunque estén aburridos y quieran salir a la calle, deben permanecer en la residencia «para que el coronavirus se termine».
Según se ha informado desde la ONCE en un comunicado, los docentes de la ONCE querían proponer a su alumnado alguna actividad que mantuviera viva la esencia de grupo, llenar los vacíos y plantearles nuevos retos que implicaran una acción manipulativa o física.
La residencia muestra su agradecimiento
«Queríamos promover la solidaridad con pequeños gestos y llevarla con ilusión que es una palabra muy de la ONCE», ha explicado Maribel Alcántara, una de las maestras del equipo educativo de la ONCE en Jaén. De esta forma, acumularon al final 25 cartas escritas, cinco audios y otros cinco vídeos que han mandado en bloque a la residencia.
Los mensajes llegaron a la residencia el martes y apenas 24 horas después la residencia movilizó a todo su personal y a sus residentes para agradecer con emoción la iniciativa. «Vuestros mensajes son una maravilla», les ha contestado Paqui en un vídeo. Salomé, otra residente, les manda muchos besos visiblemente emocionada «porque sois muy graciosos y valéis mucho», recoge otro de los vídeos.
La directora de la residencia ha apuntado que estos mensajes han llegado en el momento oportuno porque los residentes se encuentran cansados y ya no se conforman con ver a los suyos a través de la pantalla del móvil. «Ha sido el aire fresco que necesitaban, realmente emocionante, lo vamos a guardar con todo el cariño y lo vamos a tener cada día entre nosotros. Sois geniales, nunca cambiéis», concluye María José Cárdenas en su audio.
La residencia ha decido componer un mural con todos los trabajos para que permanezca en la memoria del centro como recuerdo. Además cada uno de los residentes se han hecho una foto con la imagen de cada niño que también han remitido a la ONCE.