El Congreso de los Diputados celebra entre el 28 de noviembre y el 1 de diciembre su habitual jornada de puertas abiertas para visitar sus instalaciones, un evento que será accesible para todos, incluidas las personas con problemas de movilidad y con discapacidad auditiva.
La organización de esta jornada ha hecho accesible tanto la entrada a la Cámara baja como el recorrido completo de la visita. En el primer caso, se instalará una rampa en el acceso al Congreso por la Carrera de San Jerónimo, en la conocida como Puerta de los Leones.
Del mismo modo, la Confederación Española de Familias de Personas Sordas (FIAPAS) ha puesto a disposición del Congreso bucles magnéticos individuales para facilitar a las personas que usan prótesis auditivas puedan seguir las explicaciones de los guías.
Tal y como informa la organización, las personas que deseen utilizar este servicio tienen que solicitarlo a los técnicos del Servicio de Apoyo a la Accesibilidad de FIAPAS, que se encontrarán esos días en la entrada de visitantes del Congreso en horario de 09.30 a 19.00 horas, el viernes y el sábado, y de 10.00 a 15.00 horas el domingo.
LA VISITA: VESTÍBULO, SALONES Y HEMICICLO
La visita comienza en el Patio de Floridablanca, en el que los asistentes serán recibidos con un café, chocolate o caldo recién hecho para entrar en calor durante la espera. A continuación, los ciudadanos accederán a la sede de la Cámara Baja para comenzar el recorrido en el vestíbulo de Isabel II, donde se puede contemplar la Constitución de 1812 elaborada por las Cortes de Cádiz, y custodiada por la estatua en mármol de carrara, obra de Josep Piquer i Duart, de la Reina que inauguró el edificio en 1850.
Desde el Vestíbulo principal los visitantes serán acompañados al Salón de Conferencias, conocido como Salón de los Pasos Perdidos, en el que los guías de la Cámara ofrecerán una breve explicación del recorrido completo.
En esta sala destaca la bóveda con cuatro alegorías, obra de Vicente Camarón, y los medallones que representan a los políticos más relevantes del Siglo XIX. El centro de la estancia es donde se reciben las visitas institucionales y se celebran otros actos como la recepción del Día de la Constitución.
El itinerario prosigue con en el Escritorio del Reloj, donde el protagonista, que da nombre a esta sala, es el reloj astronómico, construido por Alberto Billeter en 1857. El escritorio contiguo es el de la Constitución, donde se expone un ejemplar manuscrito de la Constitución de 1978, obra del pendolista Luis Moreno.
Justo después, los visitantes podrán acceder al Hemiciclo, la parada más esperada. Allí, se pueden sentar en los escaños de los diputados para observar las pinturas ‘El juramento de las Cortes de Cádiz’, y ‘María de Molina presentando a su hijo ante las Cortes de Valladolid’ –obras situadas a ambos lados de la Presidencia–, las cariátides y efigies de los reyes católicos situadas sobre el testero del Hemiciclo, la decoración de la bóveda, el lucernario de abanico, y todos los detalles de la sala en la que se reúne el Pleno de la Cámara.
EXPOSICIÓN DE VÁCLAV HAVEL
Ya en la primera planta del Palacio, los visitantes entrarán en la Sala Mariana Pineda, en la que se reúne la Junta de Portavoces, para ver el cuadro Mariana Pineda en Capilla, obra de Vera Calvo. Y, desde allí, atravesarán por el puente que cruza el Patio de Floridablanca hasta el primer edificio de ampliación de la Cámara, donde podrán ver la sala en la que se reúne la Diputación Permanente y se celebran reuniones de Comisión: la Sala Constitucional.
Esta estancia está presidida por el políptico, obra del pintor Hernán Cortés Moreno, que retrata a los siete ponentes o ‘padres’ de la Constitución de 1978. Además, en sus paredes también cuelga el conocido cuadro de Juan Genovés titulado ‘El abrazo’.
Antes de finalizar el recorrido, los visitantes atravesarán la sala Ernest Lluch, la estancia con mayor capacidad del Congreso de los Diputados y en la que se celebran, además de reuniones parlamentarias, otras jornadas y actos. En el hall de esta ampliación, el denominado Vestíbulo de Columnas o de Ernest Lluch, se podrá visitar la exposición «Severo Ochoa: La belleza de la ciencia».
La visita termina en este punto, con la salida por la Calle Cedaceros, pero los visitantes que lo deseen pueden atravesar la Carrera de San Jerónimo para visitar la exposición temporal ‘Václav Havel: la responsabilidad como destino’, situada en el Vestíbulo del edificio de Ampliación III del Congreso, en Carrera de San Jerónimo número 36.