Después de tener que vivir uno de los episodios más lamentables de su vida, Vivi Lopez-Castro Roiz ha vuelto a sonreir. Vivi es madre de un pequeño con autismo. Ambos, mientras paseaban por Oviedo, recibieron insultos e increpancias durante el estado de alarma.
Ella, a través de las redes sociales, denunció los hechos, algo que conmovió a la sociedad ovetense. Ahora, la Jefatura Superior de Policía de Asturias ha querido homenajear al pequeño y a su madre, haciendo entrega de un pequeño obsequio.
Con este gesto, la Policía Nacional quiere mostrar su apoyo «a muchos padres que han sido increpados por los vecinos al salir a la calle con menores», tal y como recoge El Comercio en su web.
Además, la Policía apela «a la comprensión de la difícil situación en la que viven las personas que tienen a su cargo algún menor con discapacidad intelectual, que eviten increparles y que se pongan es su lugar y que entiendan que no es un capricho sino una necesidad», como recoge el medio El Comercio.