El Hospital de Manises y la ONCE han llegado a un acuerdo para que las mujeres invidentes puedan comprobar el estado del feto durante su embarazo. El proyecto, conocido como ‘Mi Bebé 3D’ consiste en una serie de ecografías en tres dimensiones que permitirán a las personas invidentes o con visibilidad reducida saber cómo está el feto.
Este servicio se prestará de manera gratuita a las personas afiliadas a la ONCE, según informa un comunicado del Hospital de Manises.
«‘Mi Bebé 3D’ es una figura que se realiza a partir de la ecografía 3D de la semana 32 donde se puede reproducir con fidelidad el rostro o las extremidades, en el caso de que la posición del feto lo permita, ya que se obtiene una imagen nítida del feto en color. Con esta ecografía y a través de un sistema de impresoras 3D con una tecnología desarrollada por Valida Innovation, se saca una pequeña escultura del futuro bebé que reproduce sus rasgos», afirma el comunicado.
El gerente del Departamento de Salud del hospital, Ricardo Trujillo destaca que este proyecto forma parte del proceso de «humanización que ha seguido este departamento durante estos 10 años».
Por ello, recalca que «En esta ocasión se ha tratado de aportar la innovación con la tecnología 3D para hacer visible lo invisible. Lo que hasta ahora se podía ver en una ecografía, gracias a la tecnología 3D, se puede tocar. Esto nos pareció que estaba muy relacionado con personas que tenían esa falta de capacidad para poder ver una ecografía en papel y por eso se ha querido contar con la ONCE, como representante máximo de esas personas, para poner la humanización al servicio de ellos».
El Jefe de Ginecología del Hospital de Manises, Fernando Gil Raga, ha destacado que “ahora con esta tecnología pueden tocarlo, aunque sea a posteriori y hacerse una idea mucho más general de la vida que llevan dentro y de su bebé, con lo cual es una tecnología que nos permite quitar cualquier bache o handicap con cualquier otra embarazada y así se puede hacer partícipe a esta gente que tiene esas dificultades».
Gracias a las impresoras 3D, Gil ha declarado que reproducen «bastante bien los detalles», aunque, por el momento, no se puede hacer de todo el cuerpo del feto porque el ecógrafo tiene que coger una parte. «En el primer trimestre sí que se puede hacer de cuerpo completo en la semana 12, pero si queremos una visualización de la cara más precisa, se ha de esperar a la semana 28 ó 32, lo que no permite coger el bebé entero».
Marco de Rossi, encargado de la implementación tecnológica de Valida Innovations, ha detallado que el proceso comienza con un ecógrafo tridimensional que captura una imagen del feto, que más tarde es reconstruida con varios programas digitales, para obtener un modelo en 3D que «está un poco incompleto, así que se hace un proceso de reconstrucción y de remodelado digital con escultores, con un proceso bastante elaborado hasta tener un modelo digital perfecto del bebé».
Tras este proceso, se imprime en 3D hasta obtener el modelo final con silicona flexible, «para dar una mejor sensación y encontrar el color ideal, que se completa con el grabado láser». Una vez conseguida la figura, se pone en plataformas personalizadas en braille para las personas invidentes.