Desde el 1 de enero de 2023, está en vigor el nuevo sistema de cotización de trabajadores autónomos. A partir de ahora, los trabajadores autónomos deben pagar una cuota de cotización en función de sus ingresos netos mensuales. La idea es que los autónomos con menos ingresos paguen una cuota menor, mientras que aquellos trabajadores con ingresos más elevados tengan una cuota superior.
En el primer cobro de la cuota de cotización de autónomos ha surgido una gran crispación entre los trabajadores autónomos. Trabajadores y asociaciones de autónomos critican que la Seguridad Social haya añadido a la cuota de cotización el MEI (Mecanismo de Equidad Intergeneracional).
Desde la Unión Sindical Obrera explican que «el MEI es una cotización adicional, finalista, para el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, que estará en vigor, a priori, desde 2023 hasta 2032. Por cada trabajador, se cotizará 0,6 puntos. De estos, 0,5 puntos los aportará la empresa y el 0,1 le será detraído de su nómina al trabajador». En el caso de los autónomos se aplica el 0,6 directamente.
Cuota de cotización de autónomos con 900 euros
Los trabajadores con ingresos inferiores a 1.166,70 euros deben pagar una cuota de cotización a la Seguridad Social entre 230 y 275 euros al mes, tal y como recoge el nuevo sistema. Hay que tener en cuenta que las cuotas a pagar a la Seguridad Social se distribuyen en 15 tramos, en función de los ingresos que pudiese percibir cada trabajador.
Así, los trabajadores autónomos con ingresos inferiores a 670 euros, deben pagar una cuota de cotización de 230 euros al mes. Para trabajadores con ingresos entre 670 euros y 900 euros, la cuota de cotización a pagar a la Seguridad Social es de 260 euros al mes; mientras que para ingresos entre 900 euros y 1.166,70 euros, la cuota de cotización es de 275 euros al mes.
Con todo ello, los trabajadores autónomos con ingresos más bajos consideran que la cuota de cotización a pagar a la Seguridad Social es abusiva. Sin embargo, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, defiende que 2 de cada 3 autónomos pagan una cuota inferior con el nuevo sistema de cotización.
En el lado opuesto, los trabajadores autónomos con 6.000 euros o más de ingresos, deben pagar como mínimo una cuota de cotización de 500 euros a la Seguridad Social. Así se recoge en la tabla de 15 tramos elaborada por la Seguridad Social.
Nueva tarifa plana
También es posible que un trabajador autónomo con ingresos inferiores a 900 euros solo tenga que pagar una cuota de cotización de 80 euros. Para ello, debe tener derecho a la nueva tarifa plana aprobada en el nuevo sistema de cotización.
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La nueva tarifa plana permite a los nuevos trabajadores autónomos pagar solo 80 euros a la Seguridad Social durante el primer año de actividad. Además, la tarifa plana se puede prorrogar durante doce meses más, en caso de que el trabajador autónomo no consiga ingresos superiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a lo largo de su primer año de actividad.
Eso sí, la nueva tarifa plana es de 20 euros superior a la anterior, por la que los nuevos autónomos sólo debían pagar 60 euros durante el primer año de actividad. Las personas que ya venían cobrando la anterior tarifa plana de 60 euros, podrán seguir disfrutando de la misma hasta su duración final.