El que para muchas personas es catalogado el mejor deportista español de todos los tiempos; incluso, de la historia, debido a su tesón y fortaleza mental en momentos donde todo parecía estar perdido, anunciaba su retirada de las pistas de tenis el pasado 10 de octubre. Rafael Nadal Parera dijo adiós definitivo a la raqueta en la Copa Davis de Málaga donde, emocionado, el público le despidió con una atronadora ovación que hizo retumbar la infraestructura del Palacio de Deportes José María Martín Carpena.
Tras más de 20 años compitiendo en la máxima élite posible del tenis mundial, Nadal ha logrado hitos absolutamente inalcanzables y ha logrado el respeto de todo el mundo, amantes o no del deporte. Por ello, después de tantos torneos ganados, contratos publicitarios y derechos de imagen, la retirada del deporte ha puesto al tenista de Manacor en la tesitura de convertirse en pensionista, a pesar de su corta edad para ser beneficiario de una de estas prestaciones del Estado y no cumplir con los requisitos mínimos de cotización. Por tanto, ¿qué pensión de jubilación tiene Rafa Nadal?
Plan de ahorro para tenistas de la ATP
De acuerdo con la prestigiosa revista Forbes, el patrimonio de Rafa Nadal se sitúa en casi 300 millones de euros. Del mismo modo, según refleja la página oficial de la ATP, su carrera se ha traducido en 134.808.161 millones de dólares, en las que se incluyen ganancias por premios individuales y dobles. Sin embargo, es una cifra cuarenta millones menor que la de Novak Djokovic, uno de sus máximos rivales.
Así mismo, el plan de jubilación de jugadores de la ATP tiene el objetivo de proporcionar a los tenistas retirados apoyo financiero durante su la jubilación. Este plan, que se estableció y puso en marcha formalmente en 1990, ofrece a los demandantes prestaciones durante 20 años a partir de los 50 años. No obstante, para el cobro de este plan se han de cumplir una serie de requisitos por parte de los deportistas profesionales, como estar en la élite del tenis profesional por espacio de cinco años, entre los 125 mejores en individuales y entre los 40 mejores en dobles.
De esta manera, la contribución al plan de jubilación se obtiene de los ingresos que generan los torneos y jugadores, de los premios en metálico y de los derechos de TV o de licencia de los torneos. En consecuencia, la aportación de 2023 elevó los activos totales bajo gestión del fondo a 270 millones de dólares, lo que supone un considerable incremento respecto a los 37 millones de dólares acumulados en el año 2000 y permitió a los 165 jugadores profesionales que cumplieron los criterios de elegibilidad la temporada pasada recibir 113.600 dólares (unos 105.000 euros) como contribución en 2023.
¿Derecho a pensión pública?
La respuesta es clara y concisa: sí, pero no a la cuantía máxima. Y este es el gran problema al que se enfrentan los deportistas de élite, que, por regla general, se suelen retirar en torno a los 40 años sin haber cotizado el periodo suficiente para cobrar la pensión máxima, a pesar de sus ingresos. En España hay que cotizar un mínimo de 15 años para poder cobrar la pensión mínima. Además, dos de estos años deberán de estar dentro de los 15 inmediatamente anteriores a la jubilación.
Los deportistas, por salario e ingresos, cobran lo suficiente para tener la pensión máxima, pero no la consiguen porque no reúnen los años necesarios para recibir el 100% de la pensión de jubilación. Por ello, para lograr la prestación máxima tras la retirada laboral, es necesario haber cotizado un mínimo de 37 años y 6 meses, una cifra que aumentará progresivamente hasta los 38 años y 6 meses para el año 2027. Y Rafa Nadal, al igual que todos los deportistas que compiten en la élite, no ostentan este plazo de tiempo en régimen de Seguridad Social. Pero sí mucho dinero.