El Consorcio d’Habitatge de Barcelona ofrece una vivienda adaptada a Macarena

Macarena Gimenez con sus padres

Macarena Gimenez con sus padres

Buenas noticias para Macarena Giménez y su familia. La joven tetrapléjica de nacimiento lleva toda la vida residiendo en un piso del barrio de Hostafrancs de 40 metros cuadrados, sin ventilación ni ascensor.

Por ello, desde el Consorci d’Habitatge de Barcelona, integrado por la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona, ofrecerá un piso adaptado a sus necesidades.

Esta acción viene provocada por el revuelo ocasionado tras conocerse el caso a través de una entrevista en El món a RAC1, del que TODO DISCA se hizo eco.

Tras salir a la luz su situación, la responsable de la Oficina d’Habitatge del distrito de Sants-Montjuïc se ha puesto en contacto con Carme Velázquez (64), madre de Macarena. El objetivo no era otro que citar a la familia a una reunión.

Según han indicado fuentes municipales a La Vanguardia, el Consistorio ha decidido actuar con rapidez puesto que se trata de un caso de “extrema necesidad” y que requiere una solución “urgente”. Por ello, ofrecerá a la familia “varias opciones” para acceder a “una vivienda adaptada y asequible”.

Según se indica en los estatutos del Consorci d’Habitatge, es el Ayuntamiento el organismo encargado de gestionar la búsqueda de una solución para este tipo de casos. Para ello, dispone de una serie de viviendas de alquiler social para adjudicarlas a través de la Mesa de Emergencias Sociales de Barcelona.

Macarena tiene una parálisis cerebral espástica, es prácticamente ciega, sufre brotes psicóticos y necesita una silla ortopédica muy voluminosa y pesada para subir y bajar las escaleras y desplazarse.

Durante todo este tiempo la Administración no les ha concedido una vivienda accesible porque la familia supera los ingresos máximos establecidos para optar a este tipo de ayudas. Sus padres, sin embargo, llevaban más de 20 años solicitándola y han visto cumplido su deseo tras una larga espera.

En total, sus ingresos mensuales eran de 1.500 euros, entre las pensiones no contributivas de ambos miembros del matrimonio y el complemento que reciben por tener a su hija a cargo. Dicho complemento era de 442 euros adicionales en virtud de la ley de Dependencia, que se vio reducido hasta los 36 euros debido a que su madre no era cuidadora profesional.

La primera impresión es que, con dichos ingresos se podría hacer frente a la situación, pero nada más lejos de la realidad. Los gastos de cuidar a una persona con gran dependencia (medicamentos, productos de higiene, transporte, etc) provocan que tengan dificultades a final de mes.

En la actualidad, si deciden aceptar alguna de las viviendas que el Ayuntamiento les ha ofrecido, tendrán que hacer frente al pago del alquiler.

Desde el Consistorio matizan que pondrá especial celo en “no saltarse ninguna norma” en el proceso de adjudicación de un piso a esta familia. Estas declaraciones hacen referencia a que son muchas las personas en situación de emergencia habitacional en Barcelona.

Es por este motivo por el que Carme tampoco se muestra muy ilsuionada: “Me han dicho otras veces que estábamos los primeros de la lista y al final, nada”, confiesa.

Además, ha querido agradecer las muestras de apoyo y los ofrecimientos de ayuda por parte de la sociedad: “Algunas personas nos han ofrecido dinero, pero lo hemos rechazado. No pedimos caridad, sino lo que es justo”, finaliza.

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