La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa se engloban dentro de un grupo de entidades conocidas de forma genérica como Enfermedad Inflamatoria Intestinal Crónica Idiopática (EII).
Se trata de dos enfermedades autoinmunes de origen desconocido, caracterizadas por un proceso inflamatorio que, en forma crónica, continua o recurrente, afecta a distintos segmentos del tubo digestivo de la boca al ano.
Aparecen sobre todo en edades jóvenes de la vida, la edad media de diagnóstico se sitúa alrededor de los 30 años. España es uno de los países donde se concentran una mayor proporción de pacientes entre 20 a 29 años, hay unas 150.000 personas afectadas, de las cuales el 25% son niños y adolescentes. Se prevé que la prevalencia de estas enfermedades aumente en los próximos años.
Síntomas de crohn y colitis ulcerosa
Los signos y síntomas de la enfermedad de Crohn y de la colitis ulcerosa pueden oscilar entre leves y graves. Se suelen manifestar gradualmente, pero a veces se presentan de forma súbita, sin señales previas. También es posible que tengas períodos sin signos ni síntomas.
Cuando la enfermedad está activa, algunos signos y síntomas pueden ser: diarrea, fiebre, fatiga, dolor y cólicos abdominales, sangre en las heces, llagas en la boca, poco apetito y adelgazamiento, dolor o drenaje cerca o alrededor del ano debido a la inflamación de un túnel hacia la piel (fístula).
Las personas con enfermedad de Crohn grave también pueden presentar:
- Inflamación de la piel, los ojos y las articulaciones.
- Inflamación del hígado o las vías biliares.
- En los niños, retraso en el crecimiento o en el desarrollo sexual.
Causas
Aún se desconoce la causa exacta de la enfermedad de Crohn y de la colitis ulcerosa. En el pasado, se sospechaba que estaba relacionada con la dieta y el estrés; ahora, los médicos saben que estos factores pueden agravar la enfermedad, pero no la provocan.
Es probable que varios factores, como los factores hereditarios y el hecho de que el sistema inmunitario no funcione adecuadamente, intervengan en su aparición.
- Sistema inmunitario. Es posible que un virus o una bacteria desencadenen la enfermedad de Crohn. Cuando el sistema inmunitario trata de combatir microorganismos invasores, una respuesta inmunitaria anormal provoca que también ataque las células del tubo digestivo.
- Factor hereditario. La enfermedad de Crohn es más frecuente en las personas que tienen familiares con esta enfermedad. Por lo tanto, es posible que los genes influyan en la probabilidad de padecerla. Sin embargo, la mayoría de las personas con enfermedad de Crohn no tienen antecedentes familiares de la enfermedad.
Tratamiento
Hasta el momento no existe ninguna cura para la enfermedad de Crohn ni tampoco un tratamiento que funcione para todos. El objetivo del tratamiento médico es reducir la inflamación que provoca los signos y síntomas. También mejorar el pronóstico a largo plazo limitando las complicaciones. En el mejor de los casos, eso no solo alivia los síntomas, sino que puede dar lugar a la remisión a largo plazo.
- Medicamentos antiinflamatorios. La administración de medicamentos antiinflamatorios suele ser la primera medida para el tratamiento de la enfermedad intestinal inflamatoria.
- Inhibidores del sistema inmunitario. Estos medicamentos también reducen la inflamación, pero atacan ala sistema inmunitario, que es el que produce las sustancias que provocan la inflamación. Para algunas personas, la combinación de estos medicamentos funciona mejor que un solo medicamento.
- Antibiótico. Los antibióticos pueden reducir la supuración y a veces pueden curar las fístulas y los abscesos en personas que padecen la enfermedad de Crohn. Algunos investigadores también consideran que los antibióticos ayudan a reducir las bacterias intestinales perjudiciales que pueden influir en la activación del sistema inmunitario intestinal y provocar inflamación. Los antibióticos que se recetan con frecuencia comprenden la ciprofloxacina (Cipro) y el metronidazol (Flagyl).
- Otros medicamentos. Además de controlar la inflamación, algunos medicamentos pueden ayudar a aliviar los signos y síntomas, pero siempre consulta con el médico antes de tomar cualquier medicamento de venta libre.
- Terapia nutricional. Es posible que el médico recomiende una dieta especial administrada a través de una sonda de alimentación (nutrición entérica) o inyectar los nutrientes en una vena (nutrición parenteral) para tratar la enfermedad de Crohn. También el médico puede utilizar una terapia de nutrición a corto plazo y la combine con medicamentos, como los inhibidores del sistema inmunitario. Por otro lado, el médico puede recomendar una dieta con bajo contenido de fibra o residuos para disminuir el riesgo de bloqueo intestinal si tienes estrechamiento del intestino. La dieta con bajo contenido de residuos sirve para disminuir el tamaño y la cantidad de las heces.
- Cirugía. Casi la mitad de las personas que padecen la enfermedad de Crohn requerirán, al menos, una cirugía. Sin embargo, la cirugía no cura la enfermedad de Crohn. Durante la cirugía, el cirujano extrae la porción dañada del tubo digestivo y después reconecta las secciones sanas. La cirugía también puede usarse para cerrar fístulas y drenar abscesos. En general, la enfermedad vuelve a aparecer y suele hacerlo cerca del tejido reconectado.
Día Europeo de la Enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa
El Día Europeo de la Enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa se conmemora el día 13 de mayo.
Durante el día europeo se trata de informar y concienciar a la población sobre estas patologías y las consecuencias que tienen para las personas que las padecen