Desde el CERMI ha pedido a las compañías aseguradoras españolas que implanten la medida de proporcionar vehículos adaptados a conductores con discapacidad en caso de sustitución de automóvil por siniestro o avería.
Todo ello con el objetivo de las personas con discapacidad no vean resentido su derecho a la movilidad.
Esta iniciativa nace debido a que muchas aseguradoras tienen establecido como estrategia de atención al cliente ofrecer sin coste, dentro de la cobertura de la póliza, un vehículo de sustitución al conductor cuando el suyo queda fuera de servicio como consecuencia de un siniestro o una avería.
Sin embargo, esta oferta de vehículos no tiene en cuenta, en la mayoría de los casos, a las personas con discapacidad. Es decir, los discrimina. Esto se debe a que los vehículos de sustitución se limitan a automóviles estándar. Por lo que no tienen adaptaciones o acondicionamientos específicos para conductores con discapacidad.
Esto provoca discriminación extendida en los conductores con discapacidad. Ya que estos no pueden acogerse a estos servicios de sustitución de vehículos. De esta manera, les coloca en una posición de desventaja respecto del resto de conductores sin discapacidad.
Para corregir esta disfunción del mercado, el CERMI se ha dirigido a UNESPA, la patronal de la industria aseguradora. Todo ello con el objetivo de que recomiende a las compañías del ramo de automóviles que creen un parque de vehículos de sustitución adaptados a conductores con discapacidad y los ofrezcan cuando se presente la situación de necesidad.