La tarjeta acreditativa del grado de discapacidad se otorga a aquellos que cumplen ciertos requisitos. Este documento oficial permite a su titular acceder a determinados derechos, beneficios y recursos sociales en España. No obstante, no es un documento sin fecha de caducidad. La Administración pública puede cancelarlo en caso de que la persona titular fallezca, según la normativa vigente en España.
En este caso, las respectivas consejerías competentes en materia de discapacidad de las comunidades autónomas, son las que gestionan la baja de oficio de la tarjeta. Este procedimiento garantiza que solo aquellos que cumplen las condiciones tengan derecho a usar este documento.
Motivo de la cancelación de la tarjeta de discapacidad
Tal y como indica la legislación española, la tarjeta de discapacidad se cancela automáticamente cuando la persona titular fallece. Así, es la Administración autonómica quien se encarga de llevar a cabo este trámite, habitualmente a través de la consulta de registros oficiales de defunciones.
Esto quiere decir que los familiares y allegados de la persona que tenía acreditada la tarjeta de discapacidad, no deben realizar ningún trámite cuando fallezca. Por el contrario, los derechos, beneficios y recursos sociales a los que podía acceder con este documento se cancelan de forma automática.
Eso sí, desde la Administración recomiendan comunicar el fallecimiento del titular para agilizar el procedimiento. En cualquier caso, este trámite es completamente voluntario, ya que no es obligatorio al realizarse automáticamente de oficio.
Otras causas por las que puede cancelarse
El motivo más evidente de la cancelación de la tarjeta acreditativa de discapacidad es el fallecimiento del titular, por lo que casi siempre se da por este motivo. Sin embargo, existen otras causas que pueden llevar a la retirada o anulación de la tarjeta de discapacidad.
Estas son otras de las razones comunes por las que la Administración cancela el documento:
- Revisión del grado de discapacidad: si tras una revisión el nuevo grado reconocido es inferior al 33%, que es el mínimo legal para que se considere que una persona tiene discapacidad, se perdería el derecho a la tarjeta.
- Duplicidad o fraude: si se detecta un uso fraudulento del documento, como la falsificación o suplantación de identidad, la Administración puede anular la tarjeta y tomar medidas legales.
- Errores administrativos: en ocasiones, la cancelación puede estar motivada por errores en la tramitación o reconocimiento del grado, lo que obliga a revisar o suspender temporalmente el documento hasta que se resuelva la situación.
En caso de que la tarjeta acreditativa de discapacidad se haya cancelado por error o sin causa justificada, la persona interesada o sus representantes legales pueden presentar una reclamación ante la consejería autonómica correspondiente.
Consejos a tener en cuenta para mantener la tarjeta
Las personas que tienen reconocida una discapacidad, pueden solicitar la tarjeta acreditativa a los órganos competentes de las comunidades autónomas. Así, el Gobierno de España establece ciertas condiciones para su mantenimiento, que son obligatorios según la normativa vigente.
En este sentido, es fundamentar mantener actualizados los datos personales en los registros oficiales. Esto incluye notificar cambios de domicilio, situación familiar o laboral, así como cualquier modificación en el estado de salud que pueda influir en el grado de discapacidad reconocido.
Además, mantener actualizados todos los datos también ayuda a que puedan tener acceso a todos los derechos y beneficios del documento, así como evitar situaciones de cancelación incorrecta o retrasos en futuras gestiones.
La tarjeta acreditativa de discapacidad es un documento útil y muy necesario para miles de personas en España. Su cancelación se produce en casos concretos, como el fallecimiento del titular o la pérdida del reconocimiento del grado mínimo exigido.