Una nueva investigación realizada por la Escuela de Medicina Duke-NUS ha creado mini cerebros en laboratorios con la enfermedad de Parkinson. Esta es una nueva forma para saber como progresa la enfermedad en el organismo de las personas y estudiar posibles vía de tratamiento.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno neurodegenerativo del sistema nervioso que afecta al movimiento, temblor o lenguaje, y no tiene cura. Los síntomas comienzan gradualmente.
Causas de la enfermedad del Parkinson
La enfermedad de Parkinson viene precedida por la muerte o descomposición de células nerviosas (neuronas) de nuestro cerebro. Los especialistas aseguran que la mayoría de los síntomas vienen producidos por una misma pérdida: las neuronas que producen dopamina, un compuesto químico del cerebro.
La dopamina es un componente que transmite mensajes entre la sustancia negra y otras partes del cerebro. Todo ello para controlar los movimientos del cuerpo humano. Además, ayuda a los seres humanos a tener movimientos musculares coordinados y al estado de ánimo.
Está demostrado que cuando la dopamina disminuye entre un 60 y un 80%, se genera una a anómala actividad cerebral, lo que termina produciendo la enfermedad del Parkinson.
La dificultad de recrear en «modelos animales»
El profesor Ng Huck Hui, líder de grupo de la Agencia para la Ciencia , del Instituto de Tecnología e Investigación del Genoma de Singapur, señala que «recrear modelos de la enfermedad de Parkinson en animales es difícil».
Eso debe a «que estos no muestran la pérdida progresiva y selectiva de neuronas que producen el neurotransmisor dopamina, una característica importante de la enfermedad de Parkinson». Así lo señalaba el profesor que ha sido el coautor principal del estudio que ha podido crear mini cerebros en laboratorios con la enfermedad del Parkinson.
«Otra limitación es que los modelos de ratón experimentales de la enfermedad de Parkinson no desarrollan grupos característicos de proteínas llamadas cuerpos de Lewy. A menudo estas se observan en las células cerebrales de personas con enfermedad de Parkinson y un tipo de demencia progresiva conocida como demencia con cuerpos de Lewy», señala el autor.
Los llamados «organoides parecidos al mesencéfalo humano» se describieron como «construcciones de tejido in vitro, multicelulares y tridimensionales que imitan el mesencéfalo humano». Los organoides son aproximadamente del tamaño de un guisante. «Se cultivan a partir de células madre humanas en un conjunto de neuronas y otras células que se encuentran en el cerebro», según el comunicado.
«Estos experimentos son los primeros en recrear las características distintivas de la enfermedad de Parkinson que solo vemos en pacientes humanos», dijo Hyunsoo Shawn Je, profesor asociado y coautor principal del Programa de Neurociencia y Trastornos del Comportamiento en Duke-NUS.
Por último señalaba que han creado un nuevo modelo de la patología involucrada. «Esto nos permitirá rastrear cómo se desarrolla la enfermedad y cómo podría ralentizarse o detenerse».