El aguacate es un alimento saludable muy consumido en todo el mundo. Por ello, cuando están expuestos en el mercado algunos que son muy dañinos para la salud, hay que actuar lo más rápido posible. De esta forma, las autoridades sanitarias de los Países Bajos lanzaron una alerta relacionada con unos aguacates ecológicos cultivados en Marruecos. Los cuales de ser expuestos al gran público, podrían causar graves daños en la población.
Los aguacates retirados tenían en su composición residuos de una sustancia fitosanitaria, el clorpirifos (CPF), que está prohibida en la unión europea. Esto ha sido comunicado al Sistema Europeo de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rapid Alert System for Food and Feed, RASFF). Máximo responsable de controlar los productos importados de otros países a la Unión Europea.
El hallazgo de la sustancia maligna para la salud, ha sido detectado mediante un chequeo realizado por la propia empresa importadora. Que tenía como destinos supermercados de España, Holanda, Alemania y Austria. Además, también se les atribuye una infracción de la normativa europea sobre productos ecológicos. Ya que un cultivo con pesticidas, incluyendo los permitidos por la UE, quedan fuera de esta categoría.
Consecuencias de los pesticidas prohibidos en nuestra salud
Los pesticidas están relacionados según los expertos con multitud de problemas de salud. Diagnosticados a pacientes sin ninguna patología previa. En este caso, el clorpirifos está relacionado con casos de autismo, obesidad, Trastorno de Hiperactividad y Déficit de Atención (TDAH) y afectación a la capacidad intelectual. Además, también está considerado una sustancia contaminante no biodegradable. Ya que puede persistir en el medio acuático y pasar a la cadena trófica.
Este caso ya ha sido denunciado por multitud de organizaciones y asociaciones de agricultores, como la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA). Los cuales califican de «escándalo y estafa» que esta partida de aguacates supuestamente ecológicos, hayan entrado a la Unión Europea sin ningún tipo de problema.

«Hay que considerar la especial gravedad que comporta esta nueva detección en importaciones agrícolas. Porque estamos hablando, no solo de la presencia de una dosis tremendamente alta de una materia suprimida hace más de un año, sino también de un producto agrario que se vende como ecológico. Y, por tanto, no debería tener residuos de ninguna sustancia sintética», afirma el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado.
«Si tenemos en cuenta que los puntos de entrada inspeccionan menos del 10% de los cargamentos que nos llegan, esto quiere decir que hay ahora mismo aguacates de Marruecos sin las debidas garantías sanitarias. Es una estafa a todos los niveles. -Tanto para los productores, al tratarse de una competencia desleal, como para los consumidores, que son el objeto del engaño”, prosigue.
«La UE debería reconsiderar su concepto mal entendido de globalización»
La asociación de agricultores AVA-ASAJA, ha pedido a la Unión Europea que se tomen medidas cautelares para que esto no vuelva a pasar. Medidas que vayan más allá de la destrucción de los lotes detectados actualmente, ya que no serviría de nada si no se endurecieran las medidas de localización.
«Bruselas está tendiendo una alfombra roja a los países foráneos sin reciprocidad. Y sin importarle lo más mínimo si con ello nos desplazan de nuestro propio mercado. La UE debería reconsiderar su noción mal entendida de la globalización y dejar de primar la ley de la selva. Queremos y necesitamos unos controles fitosanitarios rigurosos. Además de unos tratados con estudio de impacto, reciprocidad y cumplimento estricto de las condiciones estipuladas. Y una Unión Europea que proteja a sus agricultores y no expulse a los jóvenes del campo”, finaliza Aguado.