Verano es época de vacaciones y campamentos para los más pequeños. Muchas veces se ha dado a conocer que son muchos los pequeños con discapacidad que afirman que han sido discriminados en un campamento, ya sea porque no son inclusivos o por otros motivos.
Por ello, Plena inclusión ha aprovechado para denunciar que la mayoría de campamentos de verano no son inclusivos. Muchas niñas y niños se quedan sin actividades. Ante la falta de opciones, muchas familias eligen actividades solo para niñas y niños con discapacidad que además cuestan más dinero. Por eso, Plena inclusión propone estas medidas para acabar con esta situación.
Todos los campamentos deben ser inclusivos
Todos los campamentos deben ser inclusivos. Es decir: que puedan participar niñas y niños con y sin discapacidad.
Hacen referencia que tanto a los campamentos públicos que organizan por ejemplo los ayuntamientos y también a los campamentos privados que organizan asociaciones y empresas.
No se puede aceptar que unos sean inclusivos y otros no.
Deben ser accesibles
Los campamentos deben tener en cuenta:
- La accesibilidad cognitiva: Deben ser fáciles de entender las actividades o la información de cómo apuntarse.
- Accesibilidad física. Por ejemplo: que haya rampas o ascensor.
- La accesibilidad sensorial. Por ejemplo: que haya intérprete de lengua de signos si hay una niña sorda.
No deben suponer un sobrecoste
Muchas familias de personas con discapacidad deben pagar más por apuntarse a actividades.
Ten en cuenta que ya hacen mucho esfuerzo al pagar terapias o medicinas. Así que esto no es justo: deben pagar el mismo precio.
Mejorar la contratación de personal
Las personas contratadas para trabajar en los campamentos deben:
- Ser suficientes para atender a todas las niñas y los niños.
- Recibir la formación necesaria para atender a personas que necesiten apoyo.
- Ser inclusiva. Es decir, contratar a personas con y sin discapacidad.
Luchar de forma activa contra la discriminación
Plena inclusión propone poner en marcha un sistema para recoger denuncias y datos de casos de discriminación. Así tendremos mejor información. También se debe:
- Realizar actividades para evitar la discriminación en campamentos.
- Perseguir la discriminación con avisos y multas.
- Muchos campamentos no dicen que la discapacidad es la razón para discriminar a las personas.
Pero dan otras razones como la falta de personal o que la persona «no va a estar a gusto». Pensamos que son formas de ocultar la discriminación. El Gobierno debe estudiar estas razones.
Revisar y cambiar las normas discriminatorias
Hemos recibido quejas de normas de campamentos que discriminan de forma clara. Por ejemplo: si una niña o niño estudia en un centro de educación especial no puede ir a un campamento.
Por ello, desde Plena Inclusión proponen estudiar estos casos y exigir el cambio de estas normas.
Facilitar información
Muchas familias protestan porque les cuesta mucho encontrar campamentos inclusivos.
Por ello, desde Plena Inclusión proponen que el Gobierno cree una página web con información de confianza de campamentos inclusivos.
Contar con las organizaciones
Contar con organizaciones de la discapacidad para que asesoren a empresas y administraciones al crear campamentos de verano. Un ejemplo: Plena inclusión Extremadura.
Ampliar el rango de edad de campamentos
Hay personas con discapacidad que son mayores pero necesitan y quieren participar en campamentos de verano.
Plena inclusión propone que la edad para participar pueda ser más amplia.
Premiar las buenas prácticas
También hay campamentos que sí trabajan bien y son inclusivos. Aunque son pocos. Por ello, desde Plena Inclusión proponen al Gobierno reconocer y dar visibilidad a buenas prácticas.
Por ejemplo: puede compartirse en jornadas y recibir premios o ayudas.
Ejemplos de buenas prácticas que aparecen en los medios de comunicación o que nos han enviado federaciones o familiares: