El asma es una alteración propia del sistema respiratorio, caracterizada principalmente por su afectación a los pulmones. Se trata de una patología de duración prolongada común en los niños, aunque los adultos también pueden desarrollarla.
En este sentido, el asma es una enfermedad que provoca dificultades para respirar, ocasiona opresión en el pecho, tos nocturna o temprano a primera hora de la mañana.
Así, desde la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), recomiendan que los niños con asma practiquen deporte de forma regular, ya que una vida sedentaria puede mermar su capacidad respiratoria, con los problemas que ello conlleva para el sistema respiratorio.
Asma, sistema respiratorio y ejercicio físico
Una gran cantidad de niños con asma dejan de practicar ejercicio físico, especialmente durante el periodo de primavera. Generalmente, no llevan a cabo actividades físicas para evitar ataques de asma.

Sin embargo, desde SEICAP señalan que esto «tiene justificación si el niño sigue las recomendaciones de su pediatra alergólogo». Es más, la actividad física que genera beneficios en el sistema respiratorio de los niños con asma.
En referencia a esta situación se ha manifestado el secretario de la SEICAP, el doctor Sergio Quevedo. De forma específica, detalla que «el tenis, voleibol, gimnasia, kárate, lucha, carrera rápida o natación, entre otros, son los deportes más recomendados para niños y adolescentes con asma, pues alternan momentos de esfuerzo con momentos de descanso, frente a los que suponen exposición a aire frío y seco y un esfuerzo mantenido, poco recomendables».
Además, este experto en la materia añade que «estas actividades no solo les permiten tener una buena condición física y un peso adecuado, sino que además favorecen la mejora de su sistema respiratorio al ejercitar la musculatura respiratoria, lo que resulta positivo para su enfermedad».
El deporte solo tiene beneficios para el paciente
También puede darse la situación en la que a un niño con asma le guste practicar demasiado un deporte que no sea idóneo para su enfermedad. Sin embargo, desde SEICAP recomiendan que no se prohíba, si no establecer unas pautas adecuadas.
La doctora Ana María Martínez-Cañavate, también miembro de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), advierte que «solo es desaconsejable el deporte al aire libre en días de alta polinización para menores que padecen también alergia a pólenes».
En definitiva, el deporte y el ejercicio físico moderado es recomendable para los niños con asma. Todos son beneficios, ya que ayuda a mejorar el sistema respiratorio, mantener un buen estado físico, evitar una vida sedentaria e interactuar con otros niños a través del deporte.
Existen determinados elementos que pueden causar un ataque de asma al paciente, debido a la condición de esta enfermedad. Entre los factores más importantes se encuentre el humo del tabaco, ácaros de polvo, alérgenos, contaminación atmosférica, mascotas o humo de la quema de pastos.
Si bien, la incidencia de efectos de estos factores en el sistema respiratorio dependen principalmente de cada paciente; pudiendo variar en función de cada uno de ellos.