El intestino es el gran objetivo de muchas de las comidas y bebidas que ingerimos hoy día, ya sea en el desayuno, en el almuerzo o en la cena. El estilo de vida saludable que debemos implementar en nuestra rutina debe ser el resultado de varias sumas de diferentes nutrientes, de los que no se salvan muchos alimentos que nos permiten desarrollar varias funciones dentro de nuestro organismo. ¿Está incluida dentro de esa lista la refrescante cerveza?
En este artículo vamos a repasar cuáles son las grandes ventajas y desventajas de una de las bebidas más extendidas por todo el planeta. Lejos de ser un refresco, la cerveza es una bebida única para el intestino.
¿Qué ocurre en el intestino cuando consumimos este manjar líquido? ¿Daña o beneficia las funciones intestinales, entre las que se encuentra el tránsito intestinal?
Es hora de analizar por qué la cerveza siempre será amiga de nuestra salud intestinal, sobre todo, en todo lo que concierne a la digestión y nuestra flora.
Porque hay razones nutricionales que explican que la cerveza nos aporta grandes ventajas a nivel nutricional debido a sus positivas características. ¿Quieres saber cuáles son?
El ácido butírico, la clave intestinal de tomar cerveza
La concentración del ácido butírico, que es el principal motor de energía del colonocito, estimula la absorción de sodio y agua en el colon.

Esto quiere decir que la cerveza, siempre tomada de forma moderada, y otras bebidas fermentadas, ayudan a tener un efecto potencialmente beneficioso sobre la salud intestinal.
Un estudio del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN-CSIC) de Madrid aboga por un consumo normalizado de la cerveza gracias a su cebada.
Es la fermentación de la bebida lo que provoca grandes beneficios en nuestra microbiota intestinal, un conjunto de microorganismos que viven nuestros intestinos.
Los estudios más recientes apuntan a que no hay cambios notables en la flora intestinal en sí con el consumo moderado de cerveza, pero sí con los niveles de las bacterias que juegan un rol esencial en el ecosistema intestinal.
Esto permite que bebidas como la cerveza ayuden a digerir fibras vegetales, y esto sí que es positivo para nuestra flora y nuestro tracto digestivo.
¿Toda la cerveza es buena para nuestra microbiota intestinal?
Cabe reseñar que al igual que pasa con otros alimentos, hay bebidas que no siempre responden de forma positiva sobre nuestra flora intestinal.
Siempre debemos hacer un uso moderado y responsable y siempre bajo el marco de una alimentación sana y equilibrada.
No debemos tomar alcohol, por supuesto, en el caso de que conduzcamos, tomemos medicamentos o hablemos de una mujer embarazada, claro
La cerveza tiene grandes aportes en calidad de compuestos como minerales y vitaminas que proporcionan grandes porcentajes de las cantidades diarias recomendadas.