La actriz española Silvia Alonso ha confesado públicamente que sufre un síncope vasovagal cuando ve las agujas. Esta afección de salud es más común de lo que mucha gente cree y puede ocurrir ante diferentes situaciones.
Silvia Alonso ha confesado lo que le ocurre cuando ve las agujas en el programa de radio ‘Me pasa una cosa’, presentado por Manuel Burque en la Cadena SER. En esta ocasión, la actriz ha explicado la afección de salud que sufre cuando ve una aguja.
Silvia Alonso sufre un síncope vasovagal cuando ve una aguja
Durante la entrevista, Silvia Alonso expone que «hay mucha gente que tiene miedo a las agujas, es muy común. Pero la reacción que yo tengo ante estas cosas es que me da un síncope vasovagal».
En este sentido, desde el Hospital Universitario General de Cataluña indican que «el síncope vasovagal es la pérdida de consciencia transitoria causada por una disminución del flujo sanguíneo cerebral de corta duración. Antes del síncope, puede presentar una sensación de mareo, pero la pérdida de consciencia suele ser relativamente brusca, incluso algunas veces provoca la caída al suelo».
Dependiendo de cada persona, este síncope vasovagal puede afectar de una manera u otra. En el caso de Silvia Alonso, afirma que «cuando me da pierdo el conocimiento, caigo redonda allá donde esté, ojos en blanco, convulsiones, tensión, me muerdo la lengua…».
Además, añade que «luego estoy dos días vomitando. Muy mal. Nunca me he visto, pero cómo me han descrito la situación no debe ser muy agradable». Se trata de una situación que además de ser complicada para la persona que lo sufre, suele ser angustiosa para todas aquellas personas que están cerca en el momento que se produce el síncope».
Por otra parte, Silvia Alonso comenta que «no ha pasado ni una ni dos veces que cuando vuelvo en mí, veo a un médico o a una enfermera blanco porque jamás se esperaría esa reacción».
Claves del síncope vasovagal
Los profesionales del Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario aclaran que «el síncope vasovagal es una respuesta fisiológica común, benigna, manejable con algunas estrategias preventivas, aunque pueda resultar desagradable».
Esto que le ocurre a Silvia Alonso es muy frecuente, y en la mayoría de casos no se relaciona con ninguna enfermedad. Sin embargo, la intensidad del síncope y las secuelas sí dependen de cada persona en particular.
Además de producirse por ver la sangre o agujas, el síncope vasovagal también puede generarse por otras situaciones específicas:
- Estrés emocional.
- Miedo intenso.
- Ayuno prolongado.
- Deshidratación.
- Estar de pie por periodos largos de tiempo, especialmente en ambientes calurosos.
- Durante el embarazo.
- Esfuerzo o tensión excesiva durante la micción o defecación.
- Dolor físico interno.
Lo más característico del síncope vasovagal es que se produce en apenas unos segundos, por lo que la persona no tiene tiempo en la mayoría de casos para reacciones. En ocasiones, al síncope le preceden síntomas como mareos o vértigo.
Para las personas que sufren este tipo de síncopes no existe un tratamiento como tal o medidas preventivas que lo puedan evitar. Lo más adecuado como medida preventiva es evitar aquellos estímulos que lo generan y que la persona ya suele conocer de antemano.