Una mujer de 60 años y su hijo, con una discapacidad severa, acumulan cinco meses viviendo en una tienda de campaña en Arona. Todo comenzó cuando el propietario de la vivienda en la que vivía de alquiler la echó a la calle en el mes de abril de 2025.
El hijo de esta mujer, tiene 36 años de edad y una discapacidad reconocida del 71%. A través de un vídeo ha manifestado la delicada situación en la que se encuentra junto a su hijo, ya que llevan varios meses sin poder dormir en una cama, comer caliente o asearse en un baño.
Vive en una tienda de campaña con su hijo, con una discapacidad del 71%
Los compañeros de ‘Antena 3 Noticias’ han publicado un vídeo en el que se puede observar las condiciones infrahumanas en las que vive Conchi con su hijo. Conchi tiene varios problemas de salud y, a todo ello, hay que añadirle que su hijo tiene una discapacidad del 71%.
Respecto a las condiciones en las que viven actualmente, Conchi explica que «nos aseamos con garrafas de agua, con el vestido puesto trato de lavarme como puedo todos los días y hacemos nuestras necesidades en un árbol apartado».
Conchi asegura que «no puedo más. vivimos en una pocilga». Con respecto a la comida, señala que el Ayuntamiento no le ayuda y que solamente recibe la comida que le lleva su hija de vez en cuando.
Además, en relación a la comida tienen que ir al día, ya que en la zona hay ratas e insectos. Igualmente, la comida se echa a perder con el calor. Por todo ello, denuncia que «llevo mucho tiempo sin poder comer caliente».
En la actualidad, Conchi solamente vive de su pensión y de la pensión de discapacidad que recibe su hijo. A pesar de ello, indica que no les llega para poder pagar un alquiler en Arona, al sur de la Isla de Tenerife. Ya con 60 años y diversos problemas de salud, también confiesa que tiene muchas dificultades para encontrar un empleo.
«Nos han ofrecido una caseta en un camping en Arona pero piden 900 euros al mes y no puedo pagar esa cantidad», explica Conchi desesperada sin saber que hacer y solicitando ayuda al Ayuntamiento local.
El Ayuntamiento de Arona trabaja en una solución
Hace unos 9 años, Conchi alquiló un piso en La Escalona (Tenerife) y pagaba 350 euros al mes. No obstante, comenta que el propietario nunca quiso hacerle contrato ni darle recibos que acreditaban sus pagos.
Además, esta mujer canaria asegura que durante ese periodo vivió un auténtico calvario en relación al trato que recibía por parte del propietario de la vivienda. Al respecto, denuncia que «me pegaba, me tocaba y también agredía a mi hijo. Nos hizo la vida imposible pero no podía irme porque no tenía dónde vivir».
Según su relato, en abril de 2025, el propietario de la vivienda aprovechó que Conchi y su hijo salieron de la vivienda para cambiar la cerradura. En este sentido, manifiesta que «me vi en la calle de un día para otro, no tenía a dónde ir y me ofrecieron quedarme en esta caseta rodeada de ratas y a la intemperie».
Conchi no ha tenido una vida fácil. Ahora, con 60 años y un hijo con discapacidad, se encuentra viviendo en una tienda de campaña en muy malas condiciones. Por todo ello, solicita ayuda al ayuntamiento de Arona. Así, desde el Ayuntamiento local han comunicado que conocen la situación de Conchi e incluso trabajan para ofrecerle algún tipo de ayuda.