La Playa de la Laja, en Las Palmas de Gran Canaria, será una playa más accesible para las personas con movilidad reducida. Así, el Ayuntamiento de Las Palmas ya ha iniciado el proceso de obras, con una inversión de 173.000 euros.
En concreto, estas mejoras de accesibilidad en la Playa de la Laja implica la demolición de rampas y escaleras de acceso a la arena, para su adaptación a la correspondiente normativa de accesibilidad. Estas obras serán beneficiosas para las personas mayores y personas con discapacidad.
Mejoras de accesibilidad en la Playa de la Laja
Con todo ello, el concejal de Ciudad de Mar, Pedro Quevedo, ha visitado el inicio de los trabajos para supervisar las obras de accesibilidad. Al respecto, ha comentado que «esta actuación nos permitirá mejorar de forma considerable la accesibilidad a la Playa de La Laja, uno de los principales arenales de la ciudad que cada día cuenta con mayor afluencia de bañistas».
Inicialmente, las obras de accesibilidad en la Playa de la Laja cuentan con un plazo de ejecución de cuatro meses. «Las obras facilitarán el baño a aquellas personas que tengan movilidad reducida a través de rampas y barandillas con pasamanos dobles adaptadas a la actual normativa de accesibilidad, además de instalarse pavimento podotáctil para las personas con visión reducida», añade Pedro Quevedo.
Tal y como hemos comentado anteriormente, todas estas obras tendrán como objetivo facilitar el baño y el acceso a la playa a las personas con movilidad reducida. Teniendo en cuenta los plazos de ejecución, los usuarios podrán disfrutar de estas mejoras a partir del mes de diciembre de 2025.
En concreto, los trabajos de mejora se llevarán a cabo en los dos accesos cercanos a la escultura de Tritón, el acceso situado en las proximidades del falso túnel de la autovía GC-1 y el la entrada a la Playa, junto a la Torre del Viento.
Rampas a la zona de baño para personas con discapacidad
Las obras para la mejora de accesibilidad en la Playa de la Loja consistirán, principalmente, en la demolición y replanteo de las rampas y accesos a la arena desde cuatro puntos del paseo. Así lo afirman desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Uno de los aspectos claves es que las obras no provocarán ninguna alteración en el medio natural, debido a que tienen un carácter superficial. Además, se desarrollarán en zonas de urbanización consolidadas.
Desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria señalan que «las obras se han iniciado con la demolición del pavimento existente y su excavación para llegar a la cota necesaria para las nuevas configuraciones de las rampas y las escaleras. En dos de los accesos, las rampas estarán paralelas a los muros, mientras que en otro de ellos se crearán dos tramos con direcciones opuestas y en el cuarto, ubicado en el lado norte, se construirán tres nuevos peldaños en la escalera actual para alcanzar la arena».
En su inicio, todas las rampas y escaleras tendrán una parte con pavimento podotáctil. Gracias a este pavimento, se indicará la dirección adecuada para aquellas personas con discapacidad visual. Del mismo modo, también se instalarán pasamanos dobles para facilitar el tránsito de las personas con movilidad reducida.