Los datos no engañan. El Banco de España ha publicado en su informe anual de 2024, en el que se incluye un análisis del aumento de la incapacidad temporal (IT) como factor de tensionamiento del mercado laboral español, que el porcentaje de personas en situación de baja laboral ha pasado de un 2,7 % en 2019 a un 4,4 % en 2024, «una de las tasas más elevadas de Europa». Así mismo, entre los factores determinantes de esta situación, el documento menciona el deterioro en el estado de salud percibido por los trabajadores y la correlación positiva entre el dinamismo de la actividad económica y el porcentaje de trabajadores en situación de incapacidad temporal.
Con estas cifras, es evidente deducir que el absentismo y las bajas laborales han experimentado un notable aumento en los últimos tiempos en España, que ha escalado posiciones hasta situarse, junto a Francia y Portugal, a la cabeza del ranking de absentismo laboral por incapacidad temporal entre los países de la Unión Europea. De esta manera, también se ha revelado que la media en la UE es del 2,5%, aunque se han observado aumentos significativos en otras regiones más allá de las fronteras del continente.
Baja laboral por enfermedad
Ya no es una leyenda, sino una realidad contrastada por datos y por instituciones competentes en este ámbito. El incremento del número de baja laboral, definida como la «situación en la que se encuentra el trabajador cuando está imposibilitado temporalmente para trabajar y precisa asistencia sanitaria de la Seguridad Social» no es una percepción de los empresario, sino una tesitura respaldada por los números oficiales de la Administración Pública y por los datos del Banco de España.
En este sentido, según estipula la Seguridad Social, son beneficiarios los trabajadores «afiliados y en alta, que tengan cubierto un periodo mínimo de cotización de 180 días dentro de los 5 años anteriores a la fecha de la baja, cuando ésta se deba a enfermedad común«. No obstante, en caso de accidente o enfermedad profesional no se exige periodo previo de cotización, dicta la normativa.
Finalmente, los datos arrojados por el informe ‘Absentismo Laboral por Contingencias Comunes’ de la patronal Asedas y la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT), en España en 2024 se produjeron 8.716.663 procesos de bajas por enfermedades y accidentes no laborales, que supusieron un coste de más de 28.987 millones de euros en prestaciones económicas de Seguridad Social y coste directo para las empresas. Igualmente, como ilustra con la siguiente tabla Pascual Moreno Núñez en su perfil oficial de redes sociales, el porcentaje de personas en situación de IT ha pasado de un 2,7 % en 2019 a un 4,4 % en 2024, «una de las tasas más elevadas de Europa».
Requisitos para solicitar la baja laboral en España
En España, de acuerdo con la normativa que rige la incapacidad temporal, si un trabajador desea o necesita solicitar una baja laboral, debe comprender que se han de cumplir una serie de requisitos y condiciones para que se le conceda, así como estar en permanente revisión con la empresa para valorar si se pueden acortar tiempos de recuperación o, si por el contrario, el periodo de baja se debe prolongar.
- Estar dado de alta o afiliado en la Seguridad Social.
- En caso de que la baja laboral derive de una enfermedad común, el trabajador tendrá que haber cotizado un mínimo de 180 días en los últimos 5 años.
- En caso de que la baja laboral derive de un accidente o enfermedad profesional, el período mínimo de cotización no será necesario.
De esta forma, si los aspectos anteriores se cumplen, el trabajador tendrá que presentar un certificado médico de incapacidad para recibir el subsidio mientras no pueda desarrollar su actividad en la empresa. Además, dispondrá de un plazo de 3 días para entregar el parte de baja laboral. A lo largo de la incapacidad temporal, el empleado también tendrá que presentar los partes de confirmación pertinentes, cuya periodicidad dependerá de cada caso particular.