Hoy, hace quince años un accidente laboral cambió mi vida para siempre, dejándome en silla de ruedas por una tetraplejia con un 90% de discapacidad. Un diagnóstico que mantuvo a todos en vilo, porque me debatía entre la vida y la muerte.
En estos quince años me han mostrado, de maneras que nunca hubiera imaginado, la increíble capacidad de resiliencia y fortaleza que podemos tener cuando la vida nos pone a prueba. He descubierto una profundidad en mí que no conocía, una capacidad de superación que ni siquiera sospechaba que tenía.
Desde mi silla de ruedas, he hecho cosas que jamás hubiera hecho en mi vida de bípedo. He practicado diferentes deportes y he mantenido una vida tan activa que cansa a cualquiera, imaginarse a una persona con un 90% de discapacidad. Durante estos 15 años, he creado una empresa, Tododisca, que da empleo a varias personas, un logro que me llena de orgullo y satisfacción en un mundo tan difícil como es el del emprendimiento. Además, soy el primer concejal con discapacidad de mi ciudad, Jerez de la Frontera, logrando grandes cambios a beneficio del colectivo.
Es cierto, que estas conquistas, como he comentado anteriormente, no las hubiera conseguido si no hubiera sufrido ese accidente, ya que tenía una vida muy acomodada y huía de todo aquello que saliera de mi zona de confort. Este viaje me ha enseñado que a veces, la adversidad puede abrir puertas que ni siquiera sabíamos que estaban allí.
Pero todo esto no lo he hecho solo. Detrás de cada logro, de cada paso adelante, está mucha gente. Mis seres queridos, amigos, compañeros y todas las personas que me quieren, han sido mis pilares, mis «ruedas» para mantenerme en equilibrio. Gracias a ellos, he encontrado la fuerza para seguir adelante, para seguir superándome día a día.
En este día especial, quiero agradecer a todas las personas que me han acompañado en este viaje. Su amor, su fe en mí, su apoyo incondicional, han sido las verdaderas fuerzas detrás de mis logros. Y aunque este viaje ha sido todo menos fácil, gracias a ellos, estoy convencido de que seguiremos luchando por aquello que merece la pena.
Gracias por creer en mí, gracias por luchar conmigo, gracias por ayudarme a transformar este desafío en una oportunidad para demostrar cuánto podemos lograr, incluso cuando la vida parece decidida a ponerse en nuestro camino. Sigamos viviendo la vida. Con amor, con valentía, y siempre hacia adelante.