El mensaje de Rocío contra la Eutanasia: «Yo soy Rocío y tengo parálisis cerebral»

Rocío, mujer con parálisis cerebral que se muestra en contra de la Eutanasia

Rocío, mujer con parálisis cerebral que se muestra en contra de la Eutanasia

Hace unas semanas, el Congreso aceptó la tramitación de la Ley de la Eutanasia. Con esta iniciativa, se pretende regular esta práctica e incluirla como una prestación más en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Tras esta medida, se desataron todo tipo de opiniones, tanto a favor como las que veían en esto una auténtica «máquina de matar».

Rocío, es de las que piensan lo segundo. Esta mujer, con un 98% de discapacidad, piensa que la vida no debería de detenerse nunca, por ello ha lanzado un escrito que hace reflexionar sobre esta nueva propuesta.

Mensaje al completo

«Por un error médico nací con una discapacidad del 98%. Soy usuaria de silla de ruedas, no puedo valerme de brazos ni piernas y requiero de asistencia para actos cotidianos como vestirme, lavarme, comer…

La educación facilitada por mis padres y profesores me resultó fundamental para desenvolverme: he fundado una familia, tengo un hijo adolescente y participo en temas sociales.

Tras publicar un libro con el mismo título con el que encabezo este artículo, participé en un debate televisivo frente a Ramón Sampedro, adalid de la cultura de la muerte, donde los espectadores apoyaron, por abrumadora mayoría, mis argumentaciones sobre la dignidad de toda vida y la necesaria implicación de la sociedad en el bienestar de las personas con discapacidad.

Es indignante que, cuando apenas ha transcurrido una semana desde la aprobación de la tramitación parlamentaria de una proposición de Ley de la eutanasia, los responsables de programación de TVE1, rindiendo pleitesía a las consignas gubernamentales, hayan emitido en horario de máxima audiencia (¡oh, casualidad!) la película “Mar adentro”, en la que se aplaude la opción de Sampedro por la siesta de la muerte, manipulando y anestesiando moralmente a la opinión pública al más puro estilo dictatorial, sin permitir siquiera dejarnos debatir a quienes creemos en la lucha por nuestro tesoro más valioso y la antesala de todos los derechos: la vida.»

Salir de la versión móvil