En los últimos tiempos se ha puesto muy de moda utilizar dietas ricas en proteínas con el objetivo de adquirir masa muscular, aumentar la sensación de saciedad y quemar grasa. Sumergirse en el mundo del deporte puede que haga que todo te parezca poco, y que necesites seguir sumando suplementos en tu dieta para lograr tus objetivos.
En ocasiones, son muchos los que se adentran en el mundo de los suplementos deportivos bajo la promesa de que se consigue una mayor tonificación y formación de los músculos. Pese a ello, puede haber algunos contras en el uso de este tipo de dietas. Por lo general, se cree que la ingesta excesiva de proteínas puede dar lugar a una serie de problemas de salud, como patologías renales, hepáticas o cardiacas, así como osteoporosis.
Efectos secundarios de los suplementos de proteínas
En el mercado existen todo tipo de suplementos deportivos, siendo muy demandados en los últimos años. Estos suplementos podemos encontrarlos de todas las formas: Alimentos sólidos, bebidas, concentrados, aislada o hidrolizada. Cada uno de estos tipos se adapta a la situación del deportista.
Sin embargo, debemos de tener cierta precaución, ya que de tomarlo sin supervisión de un especialista podría ser peligroso. A continuación, explicamos los principales efectos secundarios de los suplementos de proteínas:
- Los suplementos deportivos que dicen dar un bloqueo de carbohidratos pueden dar lugar a gases, náuseas, vómitos, diarreas y otro tipo de problemas digestivos.
- En caso de tener un exceso de proteínas en el cuerpo no nos quedará más remedio que eliminarlo, no como ocurre con las grasas que se pueden almacenar. Esto da lugar a una alteración del metabolismo y la sobrecarga de algunos órganos como el hígado o los riñones.
- Los suplementos de proteínas que prometen aumentar la testosterona pueden provocar retención de líquidos, impotencia, acné, calvicie, entre otros efectos. Debemos de andarnos con ojo siempre que vayamos a tomar este tipo de suplementos.
- Puede producir un mayor riesgo de descalificación de los huesos, lo que podría dar lugar a un mayor riesgo de osteoporosis.
- Si tenemos problemas de riñón es recomendable no consumir una cantidad superior a la normal de proteínas.
- El consumo excesivo de proteínas fomenta deficiencias de vitaminas y minerales.
- Puede llegar a ser tóxico para el hígado.
- Si el consumo de los suplementos de proteínas no se acompañan con hidratos de carbono, puede hacernos engordar.
- Puede producirnos ser más propensos a fracturas y otros problemas de huesos.
- Dan lugar a la aparición de piedras en los riñones, por lo que conviene beber mucha agua y prestar atención a las señales que nos manda nuestro cuerpo.