Son muchos los que prefieren utilizar productos caseros en las tareas de limpieza del hogar en lugar de químicos de supermercado. Para desinfectar y limpiar superficies llenas de suciedad, el bicarbonato y el vinagre se llevan usando desde hace muchísimo tiempo y están demostrados científicamente por qué son tan buenos como remedios para limpiar.
El hecho de que el bicarbonato y el vinagre sean extremos opuestos de la escala de pH lleva a que esta mezcla sea muy útil en tareas del hogar. «Cuando limpias con alguno de los dos, estás haciendo manipulaciones muy complicadas de moléculas» informa la profesora de química May Nyman, de la Universidad de Oregon, en ‘Live Science’.
De hecho, la experta explica que «el bicarbonato de sodio es lo opuesto al vinagre, es duro como él, pero disuelve la materia orgánica, y no será dañino al limpiar en aquellos lugares donde almacenas la comida».
La evidencia científica de esta mezcla
Esta explicación científica afirma que el pH es una medida que mide cuánto de ácida o básica es una sustancia. El agua pura tiene un pH de 7, mientras que el bicarbonato tiene un pH de 9 y el vinagre de 2. El primero disuelve aquellos compuestos orgánicos como pueden ser la suciedad o la grasa. Por su parte, la estructura mineral de cada partícula de bicarbonato de sodio proporciona un abrasivo suave para limpiar sin dejar rastro.
Además, el vinagre actúa como ácido y descompone los minerales que se forman a partir del agua del grifo, acabando así con las manchas de bañeras, fregaderos y encimeras.
En resumen, la combinación de estos dos agentes pueden ser nuestros nuevos aliados en la cocina. Eso sí, es fundamental no combinarlas en cantidades iguales, puesto que es necesario mantener la mezcla en el lado ácido del valor neutro. Cuando se mezcla el bicarbonato de sodio con vinagre, el ácido descompone el bicarbonato de sodio, liberando gas de dióxido de carbono que puede ayudar a eliminar la suciedad de las superficies que se limpian.
Situaciones para limpiar con bicarbonato y vinagre
Estos son algunos de los usos que podemos darle al bicarbonato y vinagre para limpiar en casa:
- Limpiar las cañerías: Para acabar con los atascos en las cañerías, mezcla una parte de bicarbonato de sodio con dos partes de vinagre. Esta mezcla libera una efervescencia de dióxido de carbono que desatasca los desagües y elimina la suciedad.
- Quitar manchas de agua: Coge vinagre y empapa una toalla la zona que queremos limpiar. Déjalo reposar unas horas, retira el paño y frota la zona
- Acabar con el moho de la ropa: Para ello debemos de agregar media taza de bicarbonato de sodio con el detergente para ropa y potenciar así el proceso de limpieza. Continúe esto con una taza de vinagre durante el ciclo de enjuague para matar las bacterias y suavizar de esta manera el tejido.