El sistema inmune es el conjunto de tejidos, órganos y células que se encargan de proteger al organismo frente a virus, infecciones o bacterias. Así, uno de los factores que pueden influir en el funcionamiento del sistema inmune es el consumo de bebidas alcohólicas en exceso.
Los profesionales de la salud recomiendan seguir hábitos de vida que favorezcan el funcionamiento del sistema inmune, como llevar a cabo una alimentación equilibrada y saludable, realizar ejercicio físico con regularidad o evitar el consumo de alcohol y tabaco.
Evitar el estrés y descansar adecuadamente también son dos acciones que ayudan a mejorar las defensas y a un adecuado funcionamiento del sistema inmune.
Cómo afecta el alcohol al sistema inmune
Diferentes trabajos de investigación han podido constatar que el consumo excesivo de alcohol puede debilitar el sistema inmune y reducir las defensas del organismo. Cuando esto ocurre, el organismo es más vulnerable a desarrollar diferentes enfermedades o infecciones.
En concreto, el consumo regular de alcohol puede reducir el número de linfocitos T periféricos y también parece ocasionar la pérdida de linfocitos B periféricos, tal y como informan desde la ‘International Society of Substance Use Professionals‘.
Hay que tener en cuenta que ambos linfocitos están relacionados con las defensas del organismo y juegan un papel clave en el reconocimiento y destrucción de organismos infecciosos, como bacterias y virus.
Así, estas modificaciones causas por el consumo de alcohol en el sistema inmune acaban comprometiendo la capacidad del organismo a responder a agentes patógenos, por lo que provoca una mayor susceptibilidad a las infecciones, incluidas las infecciones virales.
Por otra parte, otros trabajos de investigación sugieren que la ingesta excesiva de alcohol también afecta al sistema de defensa pulmonar, ocasionando modificaciones en la función inmune de las células locales. En definitiva, el alcohol también es especialmente perjudicial para el sistema respiratorio.
¿Qué cantidad de alcohol es nociva?
El Instituto Nacional sobre Abuso de Alcohol y Alcoholismo (NIAA, por sus siglas en inglés) es una referencia mundial con respecto al consumo de bebidas alcohólicas. Así, asegura que las personas que beben grandes cantidades de alcohol de forma regular tienen una mayor probabilidad de desarrollar enfermedades que aquellas que no beben de forma abusiva.
En cuanto a la cantidad de alcohol que puede afectar al funcionamiento del sistema inmune, desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, definen como consumo excesivo de alcohol lo siguiente:
- Ocho o más bebidas a la semana en el caso de mujeres y 15 o más bebidas a la semana para los hombres.
En este sentido, las personas que cumplen dicha proporción de consumo de bebidas alcohólicas tienen un mayor riesgo de debilitar el funcionamiento de su sistema inmune frente a enfermedades, infecciones o virus.
Por otra parte, los CDC señalan que un consumo moderado de alcohol se basa en una bebida al día para mujeres y dos bebidas diarias para hombres, en caso de que se traten de bebidas de baja graduación alcohólica.
Pero en cualquier caso, el consumo de bebidas con alcohol es perjudicial para el organismo en general, más allá de afectar al funcionamiento del sistema inmune.