La edad ordinaria de jubilación en España en 2023 es de 65 años para las personas con una cotización superior a 37 años y nueve meses a la Seguridad Social durante la vida laboral. Si bien, para las personas con menos de 37 años y nueve meses cotizados, la edad ordinaria de jubilación se sitúa en 66 años y cuatro meses. Es decir, la edad para acceder a cobrar una pensión contributiva.
En cualquier caso, los ciudadanos tienen la posibilidad de seguir trabajando más allá del cumplimiento de la edad ordinaria de jubilación que les corresponda. Esta acción se conoce como jubilación demorada.
Así, los trabajadores que deciden acogerse a la jubilación demorada tienen derecho a diferentes incentivos que les permiten aumentar de manera considerable la cuantía definitiva de su pensión contributiva de jubilación.
Pensión de jubilación para mayores de 65 años
Hay que recordar que la Seguridad Social exige un mínimo de 15 años de cotización para tener derecho a cobrar la pensión contributiva de jubilación. Si bien, para percibir el 100% de la base reguladora es necesario haber cotizado, al menos, 36 años y seis meses a la Seguridad Social.
Puede darse el caso de una persona que cumple los 65 años y ya cumple los requisitos necesarios para acceder a la jubilación y cobrar la correspondiente pensión contributiva. Si bien, supongamos que se acoge a la jubilación demorada y sigue trabajando durante dos años más.
Así, cumplir dos años más de cotización completos puede ocasionar que dicho ciudadano consiga un total de 24.000 euros adicionales que se añaden a la cuantía definitiva de su pensión contributiva de jubilación.
Este aumento del importe de la pensión se debe a los incentivos aprobados por el Gobierno de España para la jubilación demorada. Estos incentivos se recogen en la reforma de pensiones del año 2021, cuya aplicación final se ha completado en mayo de 2023.
Incentivos a la jubilación demorada
Cuando un ciudadano se acoge a la jubilación demorada, tiene la posibilidad de seleccionar entre dos tipos de incentivos principalmente. Es decir, una serie de recompensas que se añaden a la pensión contributiva por haber cotizado por encima de la edad ordinaria de jubilación que le corresponde.
Por un lado, se puede conseguir un 4% adicional en la pensión contributiva por cada año adicional cotizado a la Seguridad Social. Este porcentaje se añade a la cuantía total de la pensión.
Además, también es posible elegir una cantidad a tanto alzado que oscila entre 5.000 y 12.000 euros por cada año de más cotizado durante la vida laboral por encima de la edad ordinaria. El importe de esta cantidad depende de las cotizaciones previas del ciudadano a la Seguridad Social.
Por tanto, como máximo, un ciudadano que cotiza dos años más por encima de la edad ordinaria de jubilación en España puede ganar 24.000 euros más para la pensión de jubilación.
Finalmente, es necesario aclarar que es posible optar por un incentivo mixto. Es decir, cobrar la mitad en forma de porcentaje adicional y la mitad del importe a tanto alzado que corresponda.
Desde BBVA explican que «para aquellos que retrasen entre 2 y 10 años su jubilación, el incentivo mixto ascendería a un 4% adicional de pensión por cada año de la mitad de ese periodo (es decir, un 2% por cada año de retraso), más un pago único del 50% de lo que les hubiera correspondido si hubieran optado únicamente por el pago a tanto alzado».