En Nueva Zelanda, trabajadores de una fábrica de papas fritas encontraron en una cinta transportadora un objeto que parecía ser una papa embarrada. Sin embargo, resultó ser una granada de entrenamiento de la Segunda Guerra Mundial. El relato se volvió viral en todas las redes sociales.
Los empleados del turno noche de la fábrica de Mr. Chips en East Tamaki, un suburbio de Auckland, argumentaron que cerca de 28 toneladas de papas russet fueron trasladadas a la instalación directamente desde una granja.
El trabajador Richard Teurukura estaba vigilando la cinta transportadora en la «zona de recepción de papas» de la fábrica cuando se dio cuenta de la papa embarrada. El operario limpió el supuesto tubérculo y se lo mostró a uno de sus compañeros, quien rápidamente aseguró que era una granada. Así lo indicó en la entrevista que se volvió viral.
«Al principio se parecía mucho a una papa con barro», contó Ronald Spitaels, director de operaciones de la fábrica Mr. Chips a Stuff. «Los chicos estaban realmente tranquilos y serenos, reaccionaron de forma extremadamente profesional».
Los trabajadores se comunicaron con la policía y esta convocó al equipo de desactivación de explosivos de las Fuerzas de Defensa de Nueva Zelanda, para conocer y revisar el caso. Los expertos determinaron que el objeto era una bomba Mills, una granada de mano utilizada durante la Segunda Guerra Mundial.
A bomb squad was called to the Mr Chips factory in Auckland after a worker found a WWII-era device among the potatoes. https://t.co/0yGT7cjd0k
— Stuff (@NZStuff) April 6, 2022
El artefacto fue examinada con rayos X y se descubrió que el proyectil estaba inactivo y que había sido utilizado para fines de práctica y entrenamiento. Spitaels aseguró que era el primer incidente de este tipo en los 30 años que tiene la fábrica.