Los beneficios que la vitamina E le aporta a nuestro organismo se pierden de vista, pues se sabe que su función antioxidante es ideal para proteger las células de nuestro cuerpo y mantener el buen estado de los órganos, además de fortalecer el sistema inmunitario.
Si embargo, la ciencia todavía se encuentra investigando la influencia que está puede tener a la hora de prevenir diferentes enfermedades, dentro de las que se incluyen enfermedades mentales, problemas cardiacos y distintos tipos de cáncer, siendo el de próstata el que mayor relación podría guardar.
¿Qué es el cáncer prostático?
Este es uno de los tipos de cáncer más comunes que existen, este afecta a la próstata, un pequeño órgano del tamaño y la forma de una nuez, cuya función es producir el líquido seminal que se encarga de nutrir y trasladar el esperma.
Este tipo de cáncer suele aparecer con más frecuencia en personas de edad avanzada, así como en personas obesas, afrodescendientes y quienes tienen antecedentes familiares.
Relación entre el cáncer y las vitaminas
Un estudio científico realizado por Brigham and Women’s Hospital de la Universidad de Harvard, advierte que una variación genética puede influir en los efectos que puede tener la vitamina E sobre las probabilidades de desarrollar cáncer de próstata.
Dicho estudio usa como base el hecho de que aproximadamente la mitad de los adultos en Estados Unidos ingiere suplementos vitamínicos de forma frecuente, sin embargo los efectos que estas vitaminas, ya sea que se ingieran por alimentos o por suplementos, puede variar en cada organismos, pues las variaciones del genomainfluyen en la forma en la que se metabolizan.
¿Es buena o no la vitamina E?
Como lo dijimos en un principio, la ciencia todavía sigue investigando, ya que no existe nada que sea concluyente, de hecho todavía existen contradicciones entre miembros de la comunidad científica.
Una investigación publicada por el Journal of National Cancer Institute, indica que consumir 50 miligramos de vitamina E puede ayudar a reducir el riesgo de padecer cáncer de próstata en 32%, así como disminuir la tasa de mortalidad en 42%.
Sin embargo, el doctor Demetrius Albanes, el cual es un miembro investigador del proyecto y miembro del National Cancer Institute, sugiere que todavía no puede recomendarle a la población consumir deliberadamente cualquier suplemento de vitamina E, ya que estos también podrían afectar otras funciones, como por ejemplo la coagulación de la sangre, aumentando el riesgo de sufrir una hemorragia cerebral.
¿Qué hacer?
Por ahora, mientras la ciencia sigue investigando, lo mejor que puede hacer cualquier hombre para poder prevenir el cáncer de próstata o incluso cualquier otro tipo de cáncer, es llevar una vida saludable.
En primer lugar se recomienda estar en constante control médico para detectar a tiempo cualquier alteración en el cuerpo, sobre todo si se pertenece al grupo can mayor riesgo.
Por otro lado es importante mantener una dieta saludable, en la cual se consuman alientos naturales de forma balanceada, para esto siempre será necesaria la ayuda de un nutricionista.
Y adicional a esto, es importante incluir a la actividad física a nuestros hábitos diarios, ya que esto ayuda a mantener el buen funcionamiento del organismo y por consecuencia reduce el riesgo de sufrir cualquier tipo de enfermedad.