Las semillas de chía son uno de esos alimentos que están cada vez más presentes en nuestra rutina, sobre todo por sus grandes ventajas para nuestra salud.
Y es que son semillas comestibles de Salvia hispanica, una planta con flores de la familia de la menta nativa del centro y el sur de México.
Las propiedades que tiene son tan ricas como variadas de una semilla de chía que también conviene a nuestra salud cardiovascular.
Fuente de imega-3
Su alto nivel de cereal hace que tenga ácidos grasos omega-3 primordiales para favorecer la circulación sanguínea en nuestro corazón.
Así, las semillas de chía colaboran en la reducción de probabilidades de que podamos tener cualquier tipo de enfermedad cardiovascular.
Sobre todo, se da en casos de personas que tienen altos niveles de triglicéridos y colesterol, esa sustancia cerosa parecida a la grasa que se encuentra en todas las células del cuerpo.
- La Autoridad Europea de Salud Alimentaria (EFSA) establece que los niños de 2 a 4 años deben consumir al menos 150 miligramos al día.
- Desde los 18, cuando se cumple la mayoría de edad en España, es la Organización Mundial de la Salud (OMS) la que sugiere que se tomen entre 1 y 2 gramos al día.
- Esta cifra estadística no deja de ser relativa, y depende, entre otras cosas, si se ha tenido un evento cardiovascular o triglicéridos y colesterol elevados.
- La chía, que es el apelativo final de semillas de chía, tiene su origen en Centroamérica, y tiene un alto nivel de grasa poliinsaturada.
- Eso beneficia no sólo la lucha contra la presión sanguínea, sino que además nos permite favorecer la producción de neuronas.
- Los ácidos ayudan a mantener el corazón sano y protegido contra cualquier tipo de accidente cerebrovascular.
Mucha fibra
De ahí que poco a poco, las semillas de chía se vayan colando en nuestras dietas ricas y equilibradas debido a su fuente de fibra dietética.
Con tan sólo 15 mililitros de semillas de chía, tienes ya un 19% de la fibra diaria que recomiendan los nutricionistas y expertos en la materia.
Este dato, por tanto, revela cómo también es efectiva para cuidar de nuestro tracto intestinal en relación a la digestión y nuestra flora intestinal.
Cuanta más fibra obtengamos, siempre con moderación, más tardará el azúcar en llegar a la sangre. Así favorecemos todo estímulo digestivo en beneficio de nuestro organismo.
Asimismo, hay estudios que evidencian que el sistema cardiovascular se ve sensiblemente mejorado cuando consumimos semillas de chía.
El hecho de que forme parte de un cereal ayuda a mejorar los factores de riesgo cardiovascular, como el colesterol, los triglicéridos antes citados, y la tensión arterial.
Si todavía te quedan dudas acerca de las grandes ventajas nutritivas que aporta la chía en tu organismo, prueba a tomarla en pequeñas dosis y verás tus avances.