Los pensionistas de España también tributan al IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas). Así, muchos de ellos tienen la obligación de presentar cada año la Declaración de la Renta, ya que las pensiones contributivas se consideran por la Agencia Tributaria como rentas del trabajo.
En este sentido, este año 2023 se ha producido una revalorización de las pensiones contributivas en un 8,5% con respecto al año anterior. Este aumento se ha registrado en las pensiones contributivas de jubilación, incapacidad permanente, viudedad y orfandad. Con todo ello, este incremento también puede tener efectos sobre el IRPF.
Tramos del IRPF para las pensiones
En función de la cuantía de la pensión contributiva de jubilación, la Agencia Tributaria establece una u otra retención sobre el IRPF. Si bien, hay que tener en cuenta que cada Comunidad Autónoma puede realizar algunas variaciones mínimas en los tramos de IRPF.
Con todo ello, así quedan los tramos de retención del IRPF para las pensiones contributivas de jubilación en 2023, en función del importe anual:
- Pensiones con 12.000 euros anuales: Tributación mínima del 1%.
- Con cuantías entre 12.001 y 18.000 euros al año: Tributación mínima del IRPF en 2,61%.
- Entre 18.001 y 24.000 euros anuales: Tributación mínima del 8,69%.
- Pensiones entre 24.001 y 30.000 euros anuales: Tributación mínima del 11,83%.
- Pensiones a partir de 30.001 euros al año: Tributación mínima del 15,59%.
Estas son las retenciones mínimas sobre el IRPF que realiza la Agencia Tributaria a las pensiones contributivas de jubilación en España, en función de la cuantía económica de cada pensión. Un importe de pensión que depende del número de años cotizados a la Seguridad Social y las bases de cotización.
Pensión y Declaración de la Renta
Los pensionistas deben presentar la Declaración de la Renta al igual que el resto de trabajadores del sistema. Desde la Agencia Tributaria recuerdan que la pensión de jubilación tiene consideración de rendimientos del trabajo a efectos fiscales.
Sin embargo, no todas las personas que perciben una pensión contributiva de jubilación están obligadas a presentar la Declaración de la Renta y tributar por el IRPF. En concreto, están exentos de presentar la Declaración de la Renta, los pensionistas con un único pagador, cuyos ingresos sean inferiores a 22.000 euros.
En caso de existir dos pagadores y los ingresos son inferiores a 15.000 euros, el pensionista de jubilación también estaría exento de presentar la Declaración de la Renta ante la Agencia Tributaria.
Por su parte, las pensiones de incapacidad permanente absoluta y Gran Invalidez también están exentas de tributar el IRPF. Así se recoge en la normativa específica del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Finalmente, es necesario hablar de las pensiones de viudedad y de orfandad, que también forman parte de las pensiones contributivas del sistema español. En el caso de estas prestaciones, cuentan con una retención del IRPF única del 7,75%.
La Campaña de la Renta correspondiente al ejercicio fiscal de 2023 arranca el 11 de abril de 2023, con las primeras declaraciones de la renta de forma online a través de la Sede Electrónica de la Agencia Tributaria. Así, todos los pensionistas deben tener en cuenta ciertos aspectos claves.