Tedors Adhanom, director general de la Organización Mundial de la Salud, ha afirmado esta semana que la dexametasona, es el único fármaco que, según los datos e informes, puede reducir las muertes por coronavirus. A pesar de la infinidad de soluciones que se están estudiando, para la OMS el mejor posicionado es la dexametasona.
Según el estudio realizado por científicos de la Universidad de Oxford, en el se ha revelado que la dexametasona es capaz de reducir un tercio las muertes de pacientes con coronavirus que tienen que ser asistidos con ventilación mecánica y un quinto de ayudados con oxígeno.
Durante el estudio, tras suministrar el fármaco a 2.000 pacientes con coronaivrus, comparados con otros 4.000 con la misma enfermedad y sin el fármaco, se ha podido demostrar su eficacia. En este sentido, el riesgo de muerte del primer grupo mencionado con respiración artificial ha pasado del 40% al 20%, y para aquellos con oxígeno de un 25% al 20%.
La OMS pide ayuda a la población mundial
El experto etíope declaro que el programa de la Organización Mundial de la Salud contra el coronavirus espera contar con 245 millones de líneas de tratamiento, 00 millones de test y 2.000 millones de dosis de vacunas antes de finales de 2021.
Por ello, Tedros recordó que este programa necesita más de 35.000 millones de dólares, «el equivalente a lo que el mundo se gasta en cigarrillos cada dos semanas», de los que 15.000 millones se requieren cuanto antes.
«No es un acto de caridad, sino que estamos pidiendo que inviertan en la recuperación mundial», señaló Tedros, tras recordar que se prevé que la pandemia cause este año en el mundo pérdidas por valor de 7 billones de dólares, lo que supondría una caída del PIB global próxima al 8%.
«Los beneficios que supondrá recuperar los viajes y el comercio internacional harán que esta inversión de rápidamente rédito», comentó Tedros, quien protagoniza una activa campaña para que más países se unan al programa de vacunas COVAX, para financiar la investigación de vacunas anti coronavirus y facilitar su distribución.
¿Qué es la dexametasona?
La dexametasona es un glucocorticoide sintético que tiene unas acciones muy parecidas a las de las hormonas esteroides. Este se fabrica de manera artificial y se intenta sustituir con este medicamento a una hormona natural que produce nuestras glándulas suprarrenales.
Este fármaco puede actuar como antiinflamatorio e inmunosupresor. Se suele usar para casos de artritis, alergias, asmas, trastornos en la piel, el riñón o los intestinos. Además, en los últimos tiempos se está usando para algunos tipos de cáncer.
Por su parte, una de las ventajas es que este fármaco es muy asequible para la población, tanto por el precio como por el tratamiento. La duración es de 10 días, y en España se puede obtener tan solo con prescripción médica en la farmacia. Su precio ronda los 12 euros y se trata de un medicamento bastante común.
¿Cómo tomar correctamente este medicamento?
La dexametasona viene envasada en tabletas y en forma líquida para tomar de forma oral. Para un correcto tratamiento, debemos de seguir las instrucciones y preguntarle al doctor cualquier cosa que no entendamos. Debemos usar el medicamento tal y como se indica exactamente y no usar ni más ni menos de la dosis prescrita por nuestro médico.
No deje de tomar dexametasona sin antes conversar con su doctor. La suspensión repentina del medicamento puede causar pérdida del apetito, malestar estomacal, vómitos, somnolencia, confusión, cefalea, fiebre, dolor en las articulaciones y músculos, despellejamiento de la piel y pérdida de peso.
Si se están tomando grandes dosis de dexametasona, su doctor deberá reducir su dosis gradualmente para permitir que su cuerpo se acostumbre antes de suspender el medicamento por completo. Ponga atención a los efectos secundarios en especial si el médico le ha dicho que reduzca la dosis y después de que deje de tomar las tabletas. Si tiene problemas, llame a su doctor de inmediato. Podría ser que usted necesite una dosis más grande momentáneamente o comenzar a tomar el medicamento nuevamente.