En nuestro afán por alimentarnos bien, solo nos centramos es escoger alimentos saludables y muchas veces olvidamos que cada ingrediente de nuestra dieta debe tener un método de cocción diferente, no todos los alimentos se pueden comer crudos, como es el caso del huevo.
El huevo es un alimento que tiene presencia en la mayoría de las cocinas del mundo con grandes beneficios para nuestra salud. Tiene una gran fuente de vitaminas y minerales, donde destaca su aporte proteico, siendo uno de los alimentos preferidos para aumentar masa muscular.
Y es precisamente este último punto, el aporte de proteínas, el que ha hecho que muchas personas consuman huevos crudos en sus batidos o incluso de manera independiente, pensando que con esto podrán desarrollar músculos, pero la verdad es que esta puede ser una práctica bastante peligrosa, sobre todo porque se corre el riesgo de ser infectado con salmonella.
El huevo crudo y la salmonelosis
En la cascara del huevo puede convivir una bacteria conocida como salmonella, responsable de producir la enfermedad conocida con el nombre de salmonelosis.
Esta bacteria habita en el intestino de algunas aves de corral, y cuando ingresa en el cuerpo de una persona puede generar algunos síntomas como diarreas, vómitos, cólicos y fiebre, siendo más peligroso en niños menores de 5 años, en adultos mayores de 65 años o en personas con un sistema inmunológico débil, pudiendo generales hasta la muerte.
Es cierto que el riesgo de padecer de salmonelosis es bajo, pero como dicen por ahí, es mejor prevenir que lamentar, y nada nos cuesta cocinarlos bien antes de consumirlos.
Comer huevos crudos dificulta la digestión
Unas de las principales funciones de la cocción es contribuir al proceso de descomposición de los alimentos. En el caso de la clara del huevo, no se debe consumir crudo, ya que no podrá romper la cadena proteica y ser absorbida por el organismo.
También es cierto que el batido puede ayudar a romper estas cadenas, pero igualmente estaríamos expuestos a la salmonela.
La cocción del huevo ayuda a absorber la biotina
Una proteína llamada avidina que se encuentra en las claras de huevo crudo puede adherirse a la biotina e inhibir su absorción. Los huevos cocidos no presentan este problema
Pero cuando el huevo pasa por un proceso de cocción, esta antivitamina se neutraliza y así podremos absorber fácilmente la vitamina B8.
¿Qué otras cosas debemos saber sobre el huevo?
El huevo es un alimento bastante delicado, y además de asegúranos que su cocción se lleve a cabo correctamente, es necesario manipularlos y preservarlos adecuadamente, para evitar otro tipo de problemas.
Una de las recomendaciones es no lavarlos antes de guardarlos, esto se debe a que en su cascara hay un capa conocida con el nombre de cutícula, cuya función es proteger la superficie porosa, para que no entren microrganismos a la parte interna.
En el caso que necesitemos utilizar el huevo crudo, por ejemplo para preparar una mayonesa, podemos pasteurizarlos.
Este proceso se lleva a cabo sumergiendo los huevos en una olla y agregándoles agua hasta que estén cubiertos, para luego llevarlos a la cocina y con la ayuda de un termómetro de cocina medir hasta que alcance los 60°C, luego mantener esta temperatura durante 4 o 5 minutos, sin que se pase de ese tiempo y de esos grados.
Po último se retiran del agua caliente y se sumergen en un recipiente con agua helada hasta que tengan una temperatura normal, y estarán listos para usarlos.