Uno de los tipos de anemia más comunes es la anemia por falta de hierro en sangre. Se trata de una afección originada por la deficiencia de glóbulos rojos sanos en sangre. Y es que el hierro es un elemento fundamental para que el organismo pueda producir hemoglobina, una sustancia esencial en el transporte de oxígeno a las diferentes zonas del cuerpo. Así, la alimentación juega un papel importante en este tipo de anemia y la carne es un producto a tener en cuenta..
Las personas con anemia por falta de hierro normalmente desarrollan síntomas de cansancio, dificultad para respirar, dolores de cabeza, piel pálida y pérdida de apetito. La anemia por falta de hierro es conocida como anemia ferropénica y a veces su principal causa puede ser una escasa alimentación de carne,
La alimentación es fundamental para el buen funcionamiento del organismo. Cada alimento cuenta con unas propiedades determinadas que sirven a la estructura del ser humano para realizar diferentes funciones. En este caso, una de las causas más comunes de anemia ferropénica es la carencia de hierro en la dieta semanal.
La principal forma que tiene el cuerpo de encontrar hierro es a través de la alimentación. Si no consumimos alimentos ricos en hierro, el cuerpo desarrollará una deficiencia elevada de este elemento, y en ocasiones extremas dará lugar a la anemia ferropénico. Así, los alimentos que suponen una mayor fuente de hierro son la carne, huevo y algunos vegetales de hoja verde.
La carne es fundamental para evitar la deficiencia de hierro
Por todo lo mencionado anteriormente es fundamental contar con unos niveles de hierro óptimos en el organismo. La alimentación debe ser nuestro mejor aliado para evitar la deficiencia de este elemento, aunque también podemos incorporarlo al cuerpo a través de suplementos. Sin embargo, el hierro de los alimentos es más natural y recomendado.
Uno de los alimentos más apropiados en cuanto a su contenido en hierro es la carne, especialmente la carne de cerdo y de ave. Es cierto que existen otros alimentos que contienen más cantidad de hierro que la carne, sin embargo, el cuerpo humano tiene mayor facilidad para absorber el hierro procedente de la carne; de ahí que sea un alimento esencial para prevenir la aparición de anemia ferropénica. Los expertos recomiendan consumir carne entre dos y tres veces por semana.
Frente a la anemia, una de las mejores carnes es la carne cerdo, debido a su alto contenido en hierro y además con menos grasas. Aporta solo 3 gramos de grasas por cada 100 gramos de lomo de cerdo. Así, cada 100 gramos de carne de cerdo contienen aproximadamente 1 mg de hierro.
La carne de cerdo es muy apropiada para aumentar los niveles de hierro en el organismo. No obstante, otros tipos de carne roja y carne blanca proporcionan una buena cantidad de este elemento. En este sentido, la carne de pavo, de pollo y de ternera aportan aproximadamente 2 mg de hierro por cada 100 gramos de alimentos.
Otras excelentes fuentes de hierro son la carne de codorniz y vísceras como el hígado de ternera. Además, para el organismo es más fácil absorber el hierro procedente de estos tipos de alimentos. Por eso es muy adecuado su consumo en personas con anemia ferropénica.