Las aves son una fuente segura de proteínas para nuestra dieta, que además de deliciosas, son beneficiosas y fáciles de preparar.
Si bien las carnes toman la delantera respecto al valor proteico, están más asociadas a enfermedades del sistema circulatorio. Cabe destacar, que las aves no representan un factor de riesgo en este sentido.
Bien sea en la Grecia antigua o en Asia, estos alimentos son un punto importante en la dieta.
Asimismo son las reinas de la gastronomía, es decir, su versatilidad hace que no hayan excusas para ponerlas en tu mesa un par de veces por semana.
Recetas abundan, pero es importante que al momento de comer no solo tomes en cuenta los sabores, sino el aporte nutricional que brindan tus comidas.
Presta atención a nuestras recetas para que te mantengas sano, disfrutes de una experiencia culinaria y sorprendas a tus comensales en momentos especiales.
Importancia en la dieta
Un punto de vital importancia cuando hablamos de las aves en la dieta; es que su carne es fácil de digerir, siendo perfectas para quienes son de estómago delicado.
Además, aunque hay cortes que resultan altamente grasosos, esto no le impide ser incluidos en regímenes de adelgazamiento.
La pechuga es una sección de las aves que carece de grasa (o tiene muy poco porcentaje), por lo que si deseas bajar de peso no hay excusa para sacar este alimento de circulación.
Hay casos en los que la pechuga resulta muy seca y de poco gusto para algunos paladares, sin embargo esto se arregla con el acompañamiento de especias como la cúrcuma, pimienta, comino, jengibre, entre otros.
Asimismo es la proteína preferida de los niños, sirve para las personas con sobrepeso y su aporte calórico es bajísimo.
Los nutrientes de mayor importancia de las aves son las vitaminas B1, B2, y B6. Igualmente los minerales como el hierro, potasio, zinc y el fósforo.
De igual forma, de las aves no solo se aprovecha la carne sino las vísceras. Estas aportan también muchas vitaminas como la A, C, B12 y el ácido fólico.
Formas de preparación
La preparación de las aves para que no falten en la dieta dependerán del tipo de animal.
En el caso de las codornices preparelas a la cazuela, guisadas y asadas. Respecto a las gallinas son más disfrutables en cazuela, guisadas, hervidas, estofadas y para las dietas especiales al vapor.
Tampoco dejes de probar el pato asado, frito y a la parrilla.

Bien sea asado, en cazuela y frito puedes comer el pavo. No dejes de experimentar con las perdices asadas, en cazuela, braseadas y guisadas.
Finalmente hablaremos del pollo, el cual se postula como el más versátil de todas las aves en la dieta.
Puedes guisar los cortes, asarlos (pechugas, patas y muslos), cocinarlos a la sartén, freirlos, saltearlos o rellenarlos para meter al horno.
Recetas
Pechugas de pollo a la naranja
Ingredientes para 4 porciones
- 4 pechugas de pollo
Sal y pimienta
1 cebolla
1 diente de ajo
400 mililitros de caldo de ave
1 zanahoria
1 tronco de celery
100 mililitros de vino blanco seco
1 hoja de laurel
3 ramitas de tomillo
50 mililitros de jugo de naranja
Cáscaras de naranja
Preparación
- Limpiar las pechugas, desgrasarlas, salpimentar al gusto y reservar.
Pique la cebolla y el ajo y cocinelos en un sartén con 3 cucharadas de caldo de ave.
Incorporar la zanahoria y el celery previamente cortados y salpimentar al gusto.
Acomode las verduras con la pechuga y agregue vino blanco.
Lleve a punto de ebullición y cocine a fuego moderado hasta que el alcohol se evapore.
Aproveche para aromatizar con hojas de laurel, ramitas de tomillo y con el caldo restante.
Cocine por 20 minutos y retirar cuando estén listas.
Mantenga en cocción la salsa por 10 minutos y pase por un colador.
Hervir las cáscaras de naranja con agua abundante.
Coloque la salsa en la cacerola a fuego moderado y añada el jugo de naranja y las cáscaras previamente blanqueadas.
Cocine por 7 minutos más e incorpore la naranja pelada y cortada en rodajas.
Incorporar las pechugas, cocinar unos minutos para que ganen el olor y sabor de la fruta.
Sirva y disfrute.