La vitamina D es uno de los micronutrientes más importantes para la salud de las personas. Es beneficiosa para la salud de los huesos y un juega un papel principal en la transmisión de señales del cerebro a las distintas zonas del cuerpo.
Además, en los últimos tiempos determinados estudios han asociado la vitamina D al Covid-19. Según un trabajo de investigación realizado en la Universidad de Cantabria (Santander), el 80% de los pacientes con Coronavirus presentaban deficiencia de vitamina D.
Por motivos como estos, entre muchos otros, estamos ante una vitamina indispensable para el ser humano. Y es que la vitamina D la podemos obtener fácilmente mediante el consumo de alimentos que alberguen este micronutriente entre su composición. Pero además, la propia piel humana genera vitamina D expuesta al sol.
¿De qué manera genera la piel la vitamina D?
Hemos hablado en varias ocasiones sobre la capacidad de la piel para generar vitamina D. Pero no hemos explicado de que manera podemos hacer que el cuerpo fabrique esta vitamina sin que los rayos del sol supongan un perjuicio para la salud.
La piel alberga lo que se conoce como precursores de la vitamina D, los cuales se transforman en vitamina D activa en contacto con los rayos ultravioletas del sol. Por eso es propio que épocas donde hay poco sol durante el día, como invierno u otoño, las personas presenten carencia de este micronutriente.
Pero ojo, siempre hay que tomar el sol con cierta limitación. La exposición elevada a los rayos del sol pueden causar heridas en la piel y derivar en casos extremos a desarrollar cáncer de piel. Según los expertos, para activar la vitamina D solo se necesita una pequeña exposición al sol.
Expertos en la materia recomiendan tomar el sol durante 10 minutos tres veces por semana, habitualmente en el tramo horario comprendido entre las 10:00 y las 16:00 horas; para obtener importantes dosis de vitamina D. No obstante, en invierno recomiendan aumentar la dosis en 30 minutos tres veces por semana, en el mismo horario mencionado.
Además, existen determinadas partes del cuerpo con más incidencia a la hora de generar este micronutriente. Las partes más recomendables son los antebrazos, brazos, cara y piernas. No obstante, si alguna de estas zonas presentan delicadeza debemos protegerla del sol.
Usar crema protectora a partir del Nº8 reduce en un 95% la capacidad cutánea de generar vitamina mediante la exposición a los rayos solares.
Obtener mediante la alimentación
La otra forma principal de obtener la vitamina D es a través de una alimentación adecuada. En el mundo gastronómico encontramos una gran gama de alimentos que contienen este micronutriente entre su composición; destacando los productos de origen animal. Entre los alimentos más destacados encontramos:
- Pescados grasos: Atún, salmón, caballa,
- Hígado vacuno
- Queso
- yema de huevo
- Marisco
Normalmente, la vitamina D se encuentra en zonas grasas de los alimentos, por lo que no es habitual que las frutas contengan este micronutriente. La única fruta que aporta una buena cantidad de esta molécula es el aguacate, debido a su alto contenido en grasas. También es propia de otros alimentos como las setas, germen de trigo o champiñones.