Los triglicéridos son un tipo de grasa que se encuentra presente en nuestra sangre y nos ayuda a generar energía para nuestro cuerpo. Tener los niveles de triglicéridos en sus estándares correctos se ha vuelto una tarea imprescindible para las personas debido a los múltiples efectos negativos que produce tener estos niveles altos.
Cuando hablamos de grasas podemos referirnos al colesterol bueno LDL y al colesterol malo HDL. También sabemos que las cifras óptimas de colesterol total se deben encontrar por debajo de los 200 mg/dL. Pese a ello, existe un tercer marcador que los especialistas tienen muy en cuenta a la hora de evaluar el riesgo cardiovascular. Estos son los triglicéridos.
Como en el caso del colesterol, los triglicéridos circulan en la sangre por unas lipoproteínas que se producen en el intestino y en el hígado. Mediante estos vehículos son transportados a los tejidos donde se utilizan como reserva de energía para cubrir necesidades metabólicas de los músculos.
El principal rasgo de los triglicéridos es que almacenan las calorías no utilizadas y proporcionan energía a nuestro cuerpo. Pese a ello, cuando el organismo no consume todas las calorías las convierte en triglicéridos y se almacenan en las células grasas. Si se consumen más calorías de las que quemamos, el organismo las almacenará y por lo tanto, los niveles aumentarán, esto se denomina hipertrigliceridemia.
Niveles de triglicéridos
Para determinar los niveles de triglicéridos es necesario pasar por un examen sanguíneo regular. Tras su evaluación, se determinará si se está dentro de los parámetros normales o no.
- Menos de 150 mg/dL: Deseable
- 150-199 mg/dL: En el límite superior
- 200-499 mg/dL: Alto
- 500 mg/dL o más: Muy alto
¿Por qué suben estos niveles?
Investigadores del CIBERNONB, de la Unidad de Nutrición Humana de la Universitat Rovira i Virgili, han señalado que las personas que comen rápido retrasan la sensación de saciedad, por lo que continúan comiendo a pesar de haber cubierto sus necesidades energéticas y nutricionales.
En este sentido, ingerir grandes cantidades de energía durante un período corto favorecería a los picos más sostenidos en la glucosa plasmática e insulina, lo que puede producir un estado que estimularía la producción de grasas en el hígado y provocaría un aumento de los niveles de triglicéridos en plasma.
Principales causas de la subida de los niveles de triglicéridos en nuestro cuerpo:
- Una vida sedentaria: El llevar una vida sedentaria y sin ejercicio hará que no quememos las calorías ingeridas. Esto, junto a una dieta alta en hidratos y en grasas, hará que los triglicéridos se almacenen en las células grasas.
- Toma de medicamentos: Según que medicamentos tomemos, podrían perjudicarnos en niveles más altos de triglicéridos. Es el caso de los diuréticos, tratamientos hormonales a base de estrógenos y progestágenos, betabloqueantes, algunos inmunosupresores, y fármacos para el tratamiento del VIH.
- Dieta alta en carbohidratos: Si nuestra dieta está compuesta por más de un 60% de hidratos de carbono, existe un alto riesgo de sufrir un incremento en los niveles de triglicéridos.
Consejos para bajar los triglicéridos
Para mantener nuestros niveles de triglicéridos bajos, debemos seguir los mismos consejos que para controlar el colesterol, la hipertensión o la diabetes:
- Llevar la dieta mediterránea
- Hacer ejercicio
- Incorporar omega 3
- No fumar
- Cuidado con el alcohol
- Descansar correctamente
- Cuidar la salud de nuestra boca
- Precaución con los medicamentos
- Recurrir a remedios naturales