Todos en algún momento hemos sufrido de un terrible dolor de muelas, que además de incomodar y hacer sufrir, es capaz de eliminar el apetito de quien lo padece. Generalmente este padecimiento termina con una temida cita al dentista.
Obviando esto muchas veces la visita no es necesaria, por lo que puedes lidiar con el incómodo dolor de muelas hasta recibir ayuda médica o erradicarlo; haciendo uso de ciertos trucos y remedios caseros que presentamos a continuación:
- Mastica perejil: Esta hoja está presente en todas las cocinas del mundo. Pese a que su sabor no es paradisiaco, masticarla ayuda a disminuir el dolor, en el caso que la molestia sea provocada por una bacteria.
- Hielo para la inflamación: Si la inflamación no te deja existir, también puedes tomar unos cubos de hielo del refrigerador, envolverlos con una gasa y aplicarlo sobre la mandíbula. No coloques el hielo directamente en el sitio perjudicado.
- Usa aceite de clavo: La popular especia tiene propiedades anestésicas, antisépticas y antibacterianas, que puedes aprovechar no solo en forma de aceite, sino en su forma natural.
- Propóleo para la sensibilidad: La sensibilidad es otra de las molestias que desencadena un dolor de muelas. Si deseas calmarlo, además de erradicarlo, toma un algodón y humedécelo con propóleo.
- Agua oxigenada: Si consideras que el truco con el propóleo no es suficiente, usa agua oxigenada y aplica un par de gotas con ayuda de una algodón en la zona doliente. Sentirás alivio al poco tiempo.
- Agua tibia y sal: Adicionalmente, toma un poco de sal (en poca concentración) y agua; para enjuagar tu cavidad bucal. Recuerda que no debes ingerir la mezcla.
- Anestesia en spray: En las farmacias ofrecen sprays anestésicos y antisépticos ideales para calmar momentáneamente tu dolor de muelas. Son remedios puntuales así que no abuses de su uso.
- Antiinflamatorios: Los antiinflamatorios como el ibuprofenos o los analgésicos como el paracetamol, ayudan a soportar las molestias. Para esto consulta a un médico.
- Hilo dental: Al principio explicamos que muchas veces, un dolor de muelas no tiene porque terminar en una visita al dentista. Es común que restos de comida se alojen en las encías; hiriéndolas y provocando dolor. Por eso limpia tus dientes con un hilo dental y sentirás la diferencia.
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