El cáncer de mama está considerado el tumor más mortal en mujeres, por ello, para prevenirlo es clave llevar un estilo de vida saludable y una buena alimentación. Aunque no hay una forma segura de prevenir el cáncer de mama, hay varias cosas que puede hacer para reducir la probabilidad de contraerlo.
Una de los opciones a la hora de prevenir es realizar una mamografía, que es la técnica utilizada más eficaz para detectar anomalías hasta 2 años antes de que sean palpables. Y, además, es una prueba periódica que cubre la Seguridad Social.
En este sentido, la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) no recomienda como único método de detección la realización de autoexploraciones. De esta manera, afirma que hay que acudir a tu médico regularmente o si notas alguna anomalía en las mamas.

A continuación, desde la Asociación Americana contra el Cáncer, sugiere cinco maneras de ayudar a proteger la salud de sus senos:
1. Haga actividad física y evite pasar tiempo sentada
Muchos estudios han descubierto que la actividad física regular reduce el riesgo de cáncer de mama .
Las actualizaciones recientes de la Sociedad Americana del Cáncer (American Cancer Society) en su Guía de Dieta y Actividad Física recomiendan realizar por lo menos 150-300 minutos de intensidad moderada o 75-150 minutos de actividad de intensidad vigorosa cada semana. Lo ideal es llegar o superar los 300 minutos. Puede obtener más información acerca de la actividad física en Fitting in Fitness.

Además, debe limitar el comportamiento sedentario como sentarse, acostarse, ver la televisión y otras formas de entretenimiento en la pantalla. Esto es especialmente importante si pasa la mayor parte de su día de trabajo sentado.
2. Siga un patrón de alimentación saludable
Un patrón de alimentación saludable incluye una variedad de vegetales, legumbres ricas en fibra (frijoles y arvejas), frutas de diversos colores y granos enteros. Es mejor evitar o limitar las carnes rojas y procesadas, las bebidas endulzadas con azúcar, los alimentos altamente procesados y los productos de granos refinados. Esto le proporcionará nutrientes clave en cantidades que le ayudarán a alcanzar y mantener un peso saludable.

3. Alcanzar y mantener un peso saludable
El sobrepeso o la obesidad aumentan el riesgo de cáncer de mama, especialmente después de la menopausia. Aumentar de peso en la edad adulta aumenta el riesgo.
Después de la menopausia, la mayor parte del estrógeno proviene del tejido graso. Tener más tejido graso aumenta la cantidad de estrógeno que su cuerpo produce, lo que aumenta el riesgo de cáncer de mama. Además, las mujeres con sobrepeso tienden a tener niveles más altos de insulina. Los niveles más altos de insulina también se han relacionado con el cáncer de mama.

Si ya tiene un peso saludable, manténgalo. Si tiene un exceso de peso, intente perderlo. Hay algunas pruebas de que perder peso puede reducir el riesgo de cáncer de mama. Perder incluso una pequeña cantidad de peso también puede tener otros beneficios para la salud y es un buen punto de partida.
4. Piense cuidadosamente en el uso de la terapia de reemplazo hormonal (HRT)
Los estudios muestran que la TRH que utiliza una combinación de estrógeno y progestina aumenta el riesgo de cáncer de mama. Esta combinación también puede provocar un aumento de la densidad mamaria, lo que dificulta la detección del cáncer de mama en las mamografías. La buena noticia es que dentro de los tres años de haber dejado de usar las hormonas, el riesgo vuelve a ser el mismo que el de una mujer que no ha usado la TRH.
Para las mujeres que se han sometido a una histerectomía, tomar una TRH que sólo incluya estrógeno puede ser una mejor opción. El estrógeno solo no aumenta el riesgo de cáncer de mama. Sin embargo, las mujeres que todavía tienen un útero corren un mayor riesgo de cáncer de endometrio debido a la TRH con estrógeno solamente.

Hable con su médico sobre todas las opciones para controlar los síntomas de la menopausia, incluidos los riesgos y beneficios de cada una. Si decide probar la HRT, es mejor usar la dosis más baja que le funcione y durante el menor tiempo posible.
5. Es mejor no beber alcohol
Las investigaciones han demostrado que beber cualquier tipo de alcohol aumenta el riesgo de cáncer de mama. Si usted decide beber alcohol, la Sociedad Americana del Cáncer recomienda que las mujeres no beban más de una bebida alcohólica en un día determinado.