La Confederación Gallega de Personas con Discapacidad, conocida como COGAMI, ha elegido como presidente a Anxo Queiruga Vila, que lleva 16 años al frente. Esta confederación está integrada por 56 entidades que trabajan por la defensa de los derechos de las personas con discapacidad y su participación social en igualdad de oportunidades.
Este sonense de nacimiento y compostelano de adopción, revalida el cargo durante la celebración de la XIX Asamblea Extraordinaria celebrada en Santiago, acompañado por 40 personas representantes de la junta directiva, de entidades miembro además de personas invitadas por la Organización. Tras agradecer la confianza depositada nuevamente, Queiruga expresó «seguiremos trabajando a favor de la plena inclusión de las personas con discapacidad, exigiendo nuestro espacio en la sociedad desde una visión de derechos humanos que haga posible romper las barreras que limitan nuestra participación social».
En esta nueva etapa, a Anxo Queiruga lo acompañarán como vicepresidente Ramón Sestayo, como vicepresidenta 2ª Mónica Álvarez, como secretario general Víctor Silva, como vicesecretaria Juani Tubío, como tesorero Álvaro García, como vicetesorero Paulo Fontán, y como vocales Celso Álvarez, José Luis Costoya, Laura Quintas, Manuel Santos, Ignacio Rodríguez, Carmen Fernández, Juan Antonio De la Silva, José Luis Lolo y Monteserrat Cuevas, junto con Javier Mouriño que se suma a la directiva.
Anxo Queiruga entró a formar parte de COGAMI en el año 1997, comenzando como técnico de administración y en 2002 pasa a ser responsable de las áreas de formación y empleo. En 1998 es nombrado vicepresidente y en el año 2007 asume la presidencia de COGAMI, un cargo que vuelve a renovar en el día de hoy por cuatro años más.
Retos para esta nueva etapa
Para estos cuatro años, pese a haber avanzado, queda trabajo por hacer, por lo que entre las principales líneas de actuación que expone la directiva para esta nueva etapa destacan trabajar por un modelo de autonomía personal inclusiva en todo el ciclo vital de la persona, impulsando el diseño de modelos de apoyo a la vida independiente que combinen servicios y recursos que procuren la permanencia de las personas con discapacidad en el entorno el máximo tiempo posible, tratando de evitar su institucionalización cuando no sea el modelo elegido por la persona.
Para conseguir la no discriminación de las mujeres y niñas con discapacidad hace falta poner en marcha políticas inclusivas que den respuesta a sus necesidades y fomenten su participación social en igualdad. Igualmente, es preciso poner el foco en la infancia y en sus necesidades para potenciar el máximo desarrollo desde la edad temprana, proporcionando los apoyos necesarios a las familias y garantizando el acceso a servicios en el entorno.
Las personas con discapacidad que viven en el rural lo hacen con mayores desigualdades con respeto a lo que viven en núcleos urbanos. Por eso, es preciso garantizar que los recursos lleguen a todo el territorio, los ayuntamientos deben seguir invirtiendo en acercar los servicios a las personas.
Con Anxo Queiruga se han marcado el objetivo de alcanzar una mejor coordinación entre el ámbito social y el sanitario es prioritario para promover una correcta intervención en el campo de la salud, asegurando el acceso a medicamentos, tratamientos y productos sanitarios necesarios y una correcta intervención y la apuesta por la investigación.
Más objetivos de COGAMI
La educación inclusiva, real y efectiva, en todas las etapas formativas tiene que estar asegurada, garantizando la dotación de personal, herramientas e instalaciones accesibles. La formación es fundamental para poder optar a un trabajo que permita la independencia económica y, por lo tanto, social y familiar. COGAMI seguirá apostando por la formación orientada a la mejora de la competitividad empresarial, capacitando a las personas según las demandas del mercado, y a la generación de oportunidades laborales.
La sociedad está pensada para un estereotipo de persona que hoy en día no corresponde con la diversidad, por lo que seguiremos trabajando en la eliminación de las barreras arquitectónicas, que son las visibles, y también por las que impiden el avance, que son las sociales, promoviendo el diseño de espacios inclusivos conforme a los criterios de accesibilidad universal para asegurar la participación de todas las personas. Urge la aprobación del Decreto de Accesibilidad, vital para el desarrollo de la Ley de accesibilidad de Galicia, aprobada por unanimidad de los grupos parlamentarios en 2014, con un plazo de 24 meses para la redacción y la aprobación del mismo y que, a día de hoy sigue pendiente.
Dar respuesta a las personas con discapacidad
La cohesión del movimiento asociativo, potenciando el trabajo en red desde el ámbito local hasta el europeo, para la puesta en marcha de proyectos innovadores continuará a ser una constante en el trabajo de la entidad así como la reivindicación del cumplimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad para garantizar el ejercicio de los derechos y la protección de las personas con discapacidad.
Todo esto, apunta Queiruga, “requiere de una financiación estable y de la puesta en marcha del Concierto Social que garantice la continuidad y el inicio de nuevos servicios que den respuesta a las necesidades y demandas de las personas con discapacidad”.