La dieta cetogénica se ha puesto de moda. Así lo podemos ver en cualquier vistazo que le echemos a las redes sociales de cualquier famoso del momento. Ya que para muchos es una de las dietas que más efectos a corto plazo proporciona, o al menos eso es lo que ellos defienden.
Este tipo de dietas son muy restrictivas, ya que debemos medir los macronutrientes que ingerimos a niveles algo extremos. En este caso, los carbohidratos no son la fuente principal de energía de nuestro organismo. Sino que en el caso de la dieta cetogénica, los niveles más altos de nutrientes los vamos a consumir a través de las grasas. Estas van a hacer que el cuerpo entre en un estado de cetosis, de ahí su nombre, y perdamos grasas más rápidamente.
Esta dieta aparentemente la puede hacer cualquier persona, siempre y cuando no tenga un estado de salud especial que no soporte estas restricciones. Pero según los expertos, cuando hablamos de poner como alimentación diaria la dieta cetogénica a los niños no es tan saludable como cuando lo hacemos en un adulto.
Dieta cetogénica en niños: estas son sus consecuencias
Los niños en edad de crecimiento deben tener una alimentación equilibrada, sana y variada que les aporte todos los nutrientes necesarios para seguir el proceso de transición a adultos. Es por ello que una dieta como la cetogénica con esas características, puede hacer que los efectos secundarios que esta puede tener en adultos se multipliquen.
Cuando el cuerpo entra en estado de cetosis, comienza a sufrir una serie de cambios y consecuencias debido a que este se piensa que esta habiendo un déficit de comida. Por lo tanto, el cuerpo se prepara para pasar hambre. De ahí a que los efectos secundarios más comunes sean molestias estomacales, estreñimiento, problemas de hígado, mareos y/o nauseas.
Pero lo peor de este tipo de dietas, es que si a nosotros nos va bien queremos que toda la familia tenga la misma alimentación. Y esto es algo totalmente erróneo, ya que los más pequeños de la casa deben llevar un estilo de vida distinto al de los adultos. En este caso, la dieta cetogénica no es nada recomendable para los menores, ya que además de todos los efectos secundarios anteriormente, pueden aparecer muchos otros.
Por ejemplo, el niño puede experimentar cambios de humor, irritabilidad y cansancio. Todo ello porque su cuerpo pensará que está muriendo de hambre. Por otro lado, un déficit de carbohidratos puede provocar severas deficiencias nutricionales. Como por ejemplo descompensación en el nivel de colesterol y triglicéridos, favorecer la mala formación de los huesos o causar cálculos renales.
Por lo tanto, para los niños y niñas con sobrepeso lo mejor es que sigan las instrucciones de un profesional. Que les aconsejará cómo deben comer de forma sana y equilibrada para poder crecer con un organismo fuerte y en correcto crecimiento.
Consejos para la pérdida de peso controlada en niños
Según los especialistas en nutrición, los niños con sobrepeso deben tener una alimentación controlada pero siempre dentro de los parámetros aconsejados para que no tengan déficit de ningún nutriente. En este caso, hay que limitar el consumo de dulces y cualquier otro alimento que tenga en su composición grandes niveles de azúcar. Al igual que las bebidas azucaradas o alimentos con azúcares añadidos.
Por otro lado, también es importante que les demos la posibilidad de elegir un deporte que realmente le guste. La actividad física es algo fundamental si queremos que nuestros hijos crezcan sanos y fuertes, por lo que es necesario que empiecen desde pequeños a llevar una dieta equilibrada.