El acné es un problema cutáneo que no siempre está relacionado con los adolescentes, ya que puede aparecer a cualquier edad, causando todo tipo de molestias y problemas a nivel de la autoestima.
Es causado por la obstrucción de los folículos, los cuales se tapan por el exceso de grasa y piel muerta.
Tratarlo depende de la gravedad del asunto, pues hay varios grados de acné, los cuales requieren una intervención distinta.
Hay ciertas medidas que previenen este problema, aunque muchas veces dichas previsiones son superadas por problemas hormonales. Dermatólogos han comprobado que el estrés es un factor que incentiva la producción de grasa, favoreciendo los problemas a nivel cutáneo.
Además, hay ciertos síntomas a los que se deben prestar especial atención, como los comedones cerrados y abiertos.
Igualmente, a veces se presentan cosas de alta sensibilidad en ciertas zonas de la cara, granos con pus, nódulos y lesiones quísticas; que no son más que bultos dolorosos llenos de pus que aún no se visualizan.
Medidas de prevención contra el acné
Ante cualquier problema de salud la prevención es clave. Respecto al acné, este puede ser evitado mediante ciertos hábitos que erradican o evitan el padecimiento.
No obstante, recuerda que en muchas ocasiones las alteraciones hormonales son las culpables, por lo que ante un caso de este tipo; debes acudir a un médico para que evalúe la situación y sepa cómo atacar el problema.
Realiza una limpieza diaria
La limpieza es el pilar fundamental en la higiene personal.
Cuando nos referimos a los cuidados faciales, la limpieza es el pilar fundamental y el primer paso; que no solo requiere el enjabonar y aclarar.
Para realizar una buena labor, asegúrate de escoger un producto acorde a tus necesidades. Actualmente, el mercado brinda todo tipo de alternativas y componentes, siendo la mejor opción aquella que integra ácido salicílico.
Los expertos han comprobado que el compuesto destapa los poros y limpia a profundidad.
De igual forma, recuerda usar productos libres de parabenos, siliconas y limpiar tu rostro al despertar y antes de dormir.
Exfoliar
La exfoliación es otro paso importante para el cuidado del rostro, pues remueve las células muertas y favorece la producción de piel nueva y joven.
Se recomienda que para dermis grasas el proceso sea realizado 2 veces por semana, mientras que las dermis sensibles solo necesitan exfoliarse una vez por semana.
Del mismo modo, evitar masajear con demasiada fuerza el producto, o de lo contrario causará microcortes en la piel.
Hidrata
Uno de los errores más comunes, es creer que por generar demasiado sebo, no debemos hidratar nuestro rostro, porque de lo contrario sufriremos de acné.
Todo lo contrario, hay que hidratar para prevenir la flacidez en el rostro, por ello elige un producto rico en colágeno y que ayude a evitar el envejecimiento prematuro.
No te toques los granos
Por más desagradable que sea su apariencia, lo peor que puedes hacer es tocarte los granos, pues al tocarnos la cara con las manos sucias existe el riesgo de llevar ciertas bacterias, que provocarian una grave infección.
Alimentación
El comer alimentos ricos en grasa favorecen la aparición del acné, por lo cual se recomienda no solo evitarlas, sino llevar una alimentación balanceada para la prevención del acné.
Además, la hidratación es primordial, ya que actúa como agente limpiador.
Evita los aceites
Si sufres de acné, no uses productos faciales que contengan aceites, pues generan más grasa en el cutis.
En cuanto al maquillaje, si no es necesario no lo uses.
Haz ejercicio
El ejercicio es una actividad que favorece la eliminación de toxinas del cuerpo al sudar. lo cual limita el sufrir de acné.
Mascarillas
Las mascarillas faciales son de uso semanal, caracterizándose por tener compuestos esenciales concentrados.Por ello, escoge aquellas que sirvan para depurar el rostro, especialmente si contienen carbón activado.